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| Catedral: El edificio que se ve a la derecha |
La Catedral de San Cristóbal de La Habana se encuentra ubicada en la Plaza de la Catedral, en la Habana Vieja, dominada por dos torres desiguales y con una fachada barroca diseñada por el arquitecto italiano Francesco Borromini. Su construcción comenzó en 1748 por la Orden de los Jesuitas.
En 1767 fueron expulsados del Nuevo Mundo, quedando su obra paralizada. Once años más tarde, el obispo Felipe José de Tres-palacios y Verdeja, adquirió los terrenos proyectando en su imaginación la construcción de la catedral. Actualmente, es considerada como una de las edificaciones religiosas más bellas y sobrias del barroco americano.
Está dedicada a la Inmaculada Concepción, cuya imagen se encuentra representada en el altar mayor. Detrás de este, se encuentran tres pinturas al fresco, obra de Giuseppe Perovani. Son numerosas las obras artísticas que se encuentran en la catedral. Entre ellos, un valioso cuadro del papa disponiéndose a dar misa, que lleva en el templo desde el siglo XV.
Los trabajos de escultura, orfebrería y los del tabernáculo fueron realizados en Roma por Bianchini bajo la dirección del afamado escultor español Antonio Solá. La catedral sufrió diversas reformas dirigidas por el arquitecto Pedro Medina durante el siglo XVIII y, en 1755, se consagró la capilla, obra del cubano Lorenzo Camacho, dedicada a Nuestra Señora de Loreto.
La Iglesia no fue convertida en catedral hasta el año 1788. La disposición final del templo consta de tres naves de planta prácticamente cuadrada y alberga un total de ocho capillas laterales diferenciadas por gruesos pilares. Cuya construcción fue en gran parte mediante el uso de roca coralina proveniente del Golfo de México que a día de hoy permite ver restos de fósiles marinos..
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