Es un hecho que la población cubana está envejeciendo de manera acelerada, lo que se refleja en el aumento constante de personas de 60 años o más. Este fenómeno se debe principalmente a una baja tasa de natalidad combinada con la depauperada situación reinante, la esperanza de vida y una migración significativa de jóvenes.
Este envejecimiento representa uno de los principales problemas demográficos para la isla, y no solo eso, es que ese 25 % (2015 era del 18%) significa que para el 2050 se duplicará la proporción con más de 60 años. Sin embargo, la respuesta simplista por parte del régimen viene de los llamados expertos del Centro de Estudios Demográficos de la Universidad de La Habana (Cedem), quienes aseguran que se trata de un proceso irreversible, cuya única solución sería una elevada tasa de fecundidad. ¿Parir con la que esta cayendo?, no, de eso no hablaron.
De hecho varios obispos cubanos han presentado su renuncia por motivos de edad, como es lo habitual al cumplir los 75 años, pero el Papa ha aceptado la dimisión de algunos de forma concreta, como la del obispo de Matanzas en 2022. Otros, como el Cardenal Juan García, arzobispo de La Habana, y el obispo de Pinar del Río, siguen en funciones a pesar de haber superado la edad de retiro. En total, más de la mitad de los obispos han solicitado su renuncia por edad en 2025.
%20(1).jpg)
.jpg)
){kind=link}