Según lo asegura un artículo del periódico "La Provincia" de las Palmas, la ancestral canción de cuna "arrorró" es una antiquísima y original nana de los bereberes, habitantes del norte de África, Marruecos o Argelia, que llaman "arrau" o "arrew" a los niños pequeños, y que se introdujo hace milenios en Canarias a través de los guanches. Más tarde llegó a la Península con estos árabes y, finalmente, se incorporó al folclore doméstico de los países Americanos.
El investigador local, Francisco García-Talavera, indica que el arrorró ha traspasado las fronteras continentales africanas y se introdujo inicialmente en Canarias para pasar luego a la Península Ibérica con el numeroso contingente bereber (amazigh) que la invadió, en el siglo VIII.
García-Talavera considera que, dado que esta invasión el "arrorró" dio el salto desde Canarias al Nuevo Mundo y se incorporó al folclore doméstico de muchos países del otro lado del océano.
La versión Cubana, conocida como "Duérmete mi niño" y que como hemos visto llegó a la isla caribeña en boca de aquellos emigrantes Canarios, dice así:Arrorró mi niño,
Arrorró mi amor
Arrorró pedazo
De mi corazón.
Este niño lindo
Que nació de día
Quiere que lo lleven
A la dulcería.
Este niño lindo
Que nació de noche
Quiere que lo lleven
A pasear en coche.
Duérmete mi niño
Duérmete mi amor
Duérmete pedazo
De mi corazón.
El investigador, que fue director del Museo de Ciencias Naturales de Tenerife, señala que son dos sonoras y antiguas palabras canarias "de hondo significado materno-filial, y heredadas de nuestros antepasados" que nos hablan del inmenso cariño que nos transmitían las madres mientras nos alimentaban y nos acunaban en los transcendentales primeros meses de nuestra existencia.
"Un fino hilo conductor que nos conecta con nuestro ancestral, y poco conocido, pasado líbico-bereber norteafricano", puntualizó. Les dejamos un Arrorró al estilo ancestro canario, interpretado por doña Valentina Hernández, "la de Sabinosa", en el programa Canario "Tenderete" de 1973.
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