A ver, como te lo explico.

La señora Hebe de Bonafini

Desde el año 1912 se produjeron en la Argentina seis golpes de estado, 1930, 1943, 1955, 1962, 1966 y 1976. Los cuatro primeros establecieron dictaduras provisionales, en tanto que los dos últimos fueron de tipo permanente, adoptando un modelo de Estado burocrático y autoritario. 

Precisamente la última, la de 1976, protagonizada por el dictador Jorge Rafael Videla, se impuso un régimen de terror en el cual se violaron masivamente los derechos humanos y se produjeron miles de desapariciones, asesinatos, torturas, robos de bebés, violaciones, encarcelamientos ilegales y persecuciones ideológicas y exilios forzados, es que va este modesto post de hoy.

Pues con este régimen sanguinario y cruel, del que se asegura que mató a 30 mil argentinos, el dictador cubano Fidel Castro estrechó lazos de "cooperación" muy fuertes. En un final ambos eran lo mismo, uno de extrema izquierda y el otro del otro extremo. Y esto es lo verdaderamente hipócrita de esta relación, que mientras Fidel Castro se llenaba la boca en condenar el golpe en Chile de Augusto Pinochet, por detrás del tapete se daba la mano con este otro asesino.

Pero eso no es todo. Aún sabiendo todo esto que era un secreto a voces, menos en Cuba, y que terminó por salir a la la luz cuando la web "desclasificación" del ministerio argentino de Exteriores cuando publicó aquellos 70 folios de la embajada en La Habana que probaban rotundamente el apoyo recíproco entre esos dos regímenes, en Cuba nos solidarizábamos con las madres de la Plaza de Mayo, lideradas por la señora Hebe de Bonafini, quienes exigían conocer el paradero de sus hijos y nietos asesinados o desaparecidos durante estas dictaduras.

En la imagen, 23 y 12, cementerio de Colón, Vedado, Habana, se puede apreciar dos Chevrolets Chevys, el marrón y el azul, así como en la hilera de la derecha otro azul aparcado, un Ford Falcon de los que se hace referencia. 

Vamos a ver, que los Cubanos desconocieran esto por la férrea censura existente en la isla lo puedo entender, pero que la señora Bonafini no sabía nada, eso sí que no. Recodemos que ella estuvo en la Habana y en medio de la plaza le habló al pueblo aquel primero de Mayo. Sepa, por si no lo sabe, que la dictadura le mató al marido, a dos de sus hijos y la nuera de uno de ellos, y se encuentran desaparecidos. 

Esta señora estuvo en Cuba en cinco ocasiones y en varias de ellas se entrevistó con Fidel Castro. Y no solo eso, tuvo los arrestos de afirmar que la felicitación del dictador Cubano había sido el mayor homenaje que había recibido su organización. Le llamaba "presidente", como colmo de su indecencia. Esta mujer se ofreció "a dar su vida si fuera necesario" por ir a buscar al niño Elian a los EEUU. 

Observe lo que dijo: 

"... A raíz de lo de Elián, me comuniqué con los cubanos. Les dije que yo me proponía para ir a buscarlo. Ellos me advirtieron que podía correr peligro, (vamos como si Elian estuviera retenido en la tribu de Boko Harán.)Les contesté que estaba dispuesta a asumir el riesgo y que mi cuerpo me lo cuido yo". (Se habrá referido a su amado líder, porque al menos conmigo nunca se comunicó).

Sin palabras.

Sobre aquellos documentos, la mayoría firmados por el embajador argentino en la Habana Raúl Medina Muñoz, se referían, por ejemplo, al apoyo de Videla a Castro en la ONU, para que Cuba ingresara al Consejo Ejecutivo de la Organización Mundial de la Salud (OMS). A cambio, La Habana apoyaría a la Argentina para que fuese reelegida en el Consejo Económico y Social de la ONU (ECOSOC). Pobre señora Bonafini que no sabía nada de esto.

Dictador Jorge Rafael Videla 

La dictadura de Videla secuestró e hizo desaparecer a miles de Argentinos muchos de ellos arrojándolos vivos al mar en aquellos terribles 'vuelos de la muerte', donde les abrían la barriga y se los echaban a los Tiburones, sin embargo mientras que los representantes de la dictadura Castrista en el Comité de Derechos Humanos en Ginebra condenaban a Pinochet, jamás levantaron su voz en contra de Videla. Es más, Fidel Castro ofreció apoyo logístico al ejercito Argentino, cuando decidieron invadir las islas Malvinas.

En un final la URSS, el pseudo colonizador de Cuba, para usar esa palabrita que tanto les gusta en referencia a la república, le venía comprando a la Argentina el cereal como su mejor socio. Desde 1980 la URSS le compraba a la Argentina la tercera parte de todo lo que producían. Incluso, cuando James Carter decretó la suspensión de las exportaciones por la invasión de Afganistán, la Argentina aumentó la producción para suplir esa falta. 

A todo esto Videla, que se llenaba la boca de estar luchando contra el Marxismo "apátrida y ateo", como le llamaba, le enviaba a su amigo el tirano caribeño partidas de coches modernos ensamblados allí por marcas norteamericanas, como Dodge, Ford y Chevorlet. Vete tu a saber si a lo mejor a la Bonafini - ignorante de todo la pobre - la trasladaron de aquí para allá en uno de aquellos autos embarrados de sangre. 

¿Acaso aquellos autos fueron enviados por Videla a Cuba como agradecimiento?. No lo sabemos con exactitud, lo que sí quedó claro fue una cosa, que no solo Castro le dio apoyo a esta sangrienta dictadura, también el movimiento de países no alineados en pleno, evitando que esa dictadura no fuera condenada en la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, torpedeando los propósitos de EEUU y de otros países democráticos. 

Maldita Hemeroteca