SABIAS QUE: Las Pardelas
La pardela - conocida como la cenicienta atlántica - es una especie protegida y autóctona de las islas Azores, Canarias o Baleares que sobre vuela el mar Mediterráneo donde se le suele ver hasta el mes de noviembre. Pues esta ave, bastante grande por cierto y que dura más que un perro, suele vivir más de veinte años, tiende a atacar cuando se siente acorralada.
Me explico...
La guardia civil tiene un departamento que se dedica a la protección animal, SEPRONA, (Servicio de protección de la Naturaleza) y ellos se encargan de venir a recogerlas porque le advierto, de hacerlo usted mismo sin experiencia, correría el riesgo de salir lesionado por su pico, ya que al estar asustadas suelen ser bastante agresivas en esos momentos. Los más expertos las tapan con una manta evitando así que el animal les haga daño, luego la meten en una caja de cartón cerrada con ventilación y la colocan en un lugar tranquilo hasta que la Guardia Civil, que responde al 112, venga a recogerlas.
El tema es que los pollos, ya adultos, que han sido abandonados por sus padres en el nido, salen a realizar su primer vuelo para intentar alimentarse en el mar. Es aquí cuando suelen desorientarse con las luces del alumbrado publico, que aquí en Canarias y debido al turismo suele ser muy intenso. El ave, una vez desorientada, cae al suelo bruscamente en cualquier sitio, lo mismo en un patio que en plena vía publica.
De hecho en el sur de Tenerife se suelen recoger más de dos mil pollos al año, y el 50% de ellos en zona turísticas como los Cristianos y las Américas. Por suerte, la población se vuelca por completo en la protección de estos animales. Suele hacer sus primeros vuelos entre finales de octubre y principios de noviembre. Es un deber de todo ciudadano protegerlas, para que una vez se hayan recuperado, o bien del golpe o el estrés, ayudarlas a emprender su vuelo nuevamente.
La guardia civil tiene un departamento que se dedica a la protección animal, SEPRONA, (Servicio de protección de la Naturaleza) y ellos se encargan de venir a recogerlas porque le advierto, de hacerlo usted mismo sin experiencia, correría el riesgo de salir lesionado por su pico, ya que al estar asustadas suelen ser bastante agresivas en esos momentos. Los más expertos las tapan con una manta evitando así que el animal les haga daño, luego la meten en una caja de cartón cerrada con ventilación y la colocan en un lugar tranquilo hasta que la Guardia Civil, que responde al 112, venga a recogerlas.
Una vez despega sigue las rutas migratorias que le indica su instinto, llegando a pasar por la zona del sur de África o Sudamérica en función de las corrientes. En Canarias también existen entidades dedicadas a su recuperación, como la Asociación de Amigos de las Pardelas y además se realizan actividades con profesionales para soltar los pájaros después de su rescate, así la ciudadanía logra empatizar con el ave y ayuda a su protección.
Maldita Hemeroteca
