viernes, 6 de enero de 2023

El beisbol no estuvo inmune a la mortal gripe española

Foto: ( Hall of Fame / cortesía de la Biblioteca del Congreso)

Hace cien años, Silk O'Loughlin, segundo de izquierda a derecha, era considerado uno de los mejores y más renombrados umpires de las Grandes Ligas. Entonces el famoso árbitro, en el mejor momento de su carrera, fue víctima de una infección de acción rápida que en ese momento estaba aniquilando a miles de personas en todo el país, y a un ritmo asombrosamente rápido. La gripe española.

Con los horrores de la Primera Guerra Mundial en su último año, una batalla de vida o muerte a un nivel más microscópico también estaba teniendo lugar en todo el mundo. La pandemia de la gripe de 1918 fue una cepa - altamente contagiosa - que atacaba brutalmente el sistema respiratorio de las personas.

Para cuando se había extendido por los Estados Unidos, el evento mortal había matado a unos 675.000 estadounidenses. Y el béisbol no era inmune. La "gripe española" duró sólo 15 meses, pero se cobró la vida, según las mejores estimaciones de hoy, entre 50 y 100 millones de personas en todo el mundo. Se estima que infectó a unos 500 millones, o lo que es lo mismo, aproximadamente un tercio de la población del planeta. 

Entre las bajas que ocasionó en el beisbol estuvo el escritor deportivo del Boston Globe, Eddie Martin, el secretario de la Asociación de Escritores de Béisbol de América y uno de los anotadores oficiales en la Serie Mundial de 1918; Chandler Richter, el escritor de béisbol con sede en Filadelfia e hijo del editor de The Sporting Life, Francis S. Richter, así como el ex árbitro de la Liga Federal, J.J. McNulty. 

Entre los jugadores activos la gripe se cobró la vida de Cy Swain, un jugador de ligas menores entre 1904 y 1914 que bateó 39 jonrones en 1913; Larry Chappell, un jardinero de grandes ligas que jugaba para los Medias Blancas, Indios y Boston Braves entre 1913 y 1917; el receptor Leo McGraw, un liga menor entre 1910 y 1916; el receptor Harry Glenn, un liga menor de 1910 a 1918 que pasó tiempo con los Cardenales del 1915; el lanzador de ligas menores Dave Roth, que jugó entre 1912 y 1916 y el lanzador de ligas menores Harry Acton, que lo hizo en 1917.

El umpire O'Loughlin, de apenas 46 años, un juez que había expulsado a 146 peloteros durante los partidos, esta vez la gripe lo expulsaba a él un día 20 de diciembre de 1918. Murió en su apartamento de Boston y su esposa Agnes, también contagiada en ese momento, logró sobrevivir y heredar una fortuna de 25 mil dólares de la época. Extracto de Hall of Fame.

SECCIONES/MENU