La estadounidense Madison Keys destrozó todos los pronósticos en el Open de Australia. No le bastó con remontar una bola de 'match' en semifinales a la nº 2, la polaca Iga Swiatek.
Consumó su obra maestra derrocando a la bicampeona y nº 1 mundial, la bielorrusa Aryna Sabalenka, por 6-3, 2-6 y 7-5 en 2h.02'. A sus 29 años, ocho después de haber perdido la final del US Open 2017 ante su compatriota Sloane Stephens, vivió su momento de gloria en el tenis mundial.
Recién casada con el exjugador Bjorn Fratangelo, desde la fiesta en noviembre todo ha sido felicidad para pupila y entrenador. Ha ganado 13 de sus 14 partidos, se ha impuesto en los últimos once. Pudo con la que estaba llamada a ser la reina por tercera vez consecutiva. Se quedó sin 'hat trick' Sabalenka, que destrozó la raqueta una vez consumó su derrota. MD