Jeff Porcaro, quien se cri0 en el Valle de San Fernando, Los Ángeles, comenzó a tocar batería a los 7 años de edad, tomando lecciones con su padre Joe y, más tarde con Bob Zimmitti y Richie Lepore. A los 16 años de edad ya tenía decidido ser baterista.
A los 17 años consiguió su primer trabajo serio como profesional, tras ser contratado como baterista para tocar en Las Vegas con Sonny and Cher, a cambio de 400 dólares a la semana. Luego de esa experiencia Jeff Porcaro haría varias grabaciones para Steely Dan, antes de fundar el grupo Toto en 1978 junto al tecladista David Paich, banda a la que también se integrarían sus hermanos Steve y Mike Porcaro, el guitarrista Steve Lukather, el bajista David Hungate y el cantante Bobby Kimball.
El álbum debut de Toto, llamado simplemente “Toto”, incluía el single “Hold the Line”, que se transformaría en un éxito mundial, lo que provocó que el álbum fuera premiado con un disco multi platino. La carrera de Toto llegaría a su cénit en 1982 con el lanzamiento del álbum “Toto IV”, disco que vendería 5 millones de copias en esa época y sería premiado con seis premios Grammy -todo un récord para la época-, incluido un premio Grammy al Mejor Álbum del año.
Los dos singles más exitosos de ese disco serían “Rosanna” (N°2 en los Estados Unidos) y “África”, canción escrita por el propio Jeff Porcaro y David Paich, y que llegaría al N°1 del los Top 100 de la Billboard en Estados Unidos en febrero de 1983.
Toto IV fue no solo su consagración, si no la del grupo
En el álbum “Toto IV” todos los integrantes de la banda demostrarían su gran habilidad compositiva e interpretativa, especialmente el baterista Porcaro, quien en la canción “Rosanna”, una gran pieza de cinco minutos y 30 segundos de duración que mezclaba jazz y rock, consiguió que vendería dos millones de copias. Además en este tema creo el llamado “Rosanna Shuffle”, un complejo beat de batería que para algunos es el más reconocible y esencial groove de batería de todos los tiempos. (+- dejar que la baqueta lleve el ritmo rebotando ligeramente en el drums en vez de golpes secos).
El 22 de octubre de 1983 Jeff Porcaro se casaría con Susan Norris, una presentadora de televisión de Los Ángeles con quien tendría tres hijos. Paralelamente a su labor como baterista y percusionista de Toto, Jeff Porcaro sería solicitado como músico de sesión gracias a su impecable sentido rítmico y gran versatilidad musical.
Colaboró con artistas como Michael Jackson (en las canciones “Beat it” y “The Girl is mine”, incluidas en el álbum “Thriller”), con Boz Scaggs (en la canción “Lowdown”), con Aretha Franklin (en la canción “What a fool believes”), Pink Floyd (en la canción “Mother”), Bruce Springsteen (en la canción “Human Touch”), Los Bee Gees (en la canción “Living Eyes”), Dire Straits (en la canción “Calling Elvis”) y Lionel Ritchie (en la canción “Running with the night”).
También sería convocado para tocar la batería por otros músicos y cantantes como Don Henley, Diana Ross, Paul Simon, Eric Clapton, David Gilmour, Roger Waters, Paul Anka, Miles Davis, Elton John, Paul McCartney, Joe Cocker, Rod Stewart, Madonna y los artistas latinos Sergio Mendes, Luis Miguel y Rubén Blades.
Hasta el mítico John Bonham, de Led Zeppelin, tuvo que pedirle ayuda
Conocida fue la colaboración de Jeff Porcaro durante la grabación de la canción “All My Love” (1979), el ultimo gran clásico de la legendaria banda inglesa Led Zeppelin. Se cuenta que el baterista John Bonham estaba trabajando en la parte rítmica de esa canción y estaba particularmente complicado porque no lograba hacer que sonara fluida, natural y espontánea, de modo que el ritmo de la batería se balanceara espontáneamente acompañando la voz de Robert Plant.
Entonces Steve Lukather, guitarrista de Toto que escuchó del problema de Bonham, le dijo “hey, John ¿Por qué no le pides a Jeffrey -Jeff Porcaro- que te eche una mano?. Él es muy bueno para capturar la esencia de las canciones”. “¿En serio? ¿Y tú crees que quiera ayudarme?”, le preguntó Bonham, a lo que Lukather le respondió “¡Por supuesto!”.
De ese modo, John Bonham y Jeff Porcaro se juntaron a trabajar la parte rítmica de “All my love”, la última gran canción de Led Zeppelin y de hecho mucho de lo que se escucha en ese tema tiene el inconfundible sello de Jeff Porcaro, un musico que llegó a participar en la grabación de 1060 álbumes contabilizados.
Cheques en blanco pero no traicionó
El cantante y líder del grupo inglés Dire Straits, Mark Knopfler, de quien se dice que le habría ofrecido un cheque en blanco a Jeff Porcaro a cambio de que se integrara a su grupo, comentaría que “una de los cosas por las que me gustó tanto grabar el disco de Dire Straits ‘On Every Street’ fue trabajar con Jeff. Es un artista”.
1060 colaboraciones contabilizadas
Jeff Porcaro participó en mil sesenta discos como músico de sesión. Entre los años 70′ y principios de los años 90, Jeff Porcaro sería considerado como uno de los mejores bateristas del mundo, pero su prematura muerte interrumpió una carrera que pudo llegar a cotas aún más altas. El sitio Allmusic aseguró, por lo pronto, que “no es una exageración decir que el sonido pop/rock de los 80′s se lo deben a él”.
Según los críticos, Jeff Porcaro, considerado el maestro del Groove, cambió la percepción y la forma de entender la batería como un instrumento rítmico. El mismo Porcaro reconocería que “para tocar batería hay que escuchar la canción antes de todo, sumergirse en ella y apartar el ego, no tocar para uno mismo ni para el productor que te contrata, sino para la música”.
Sin embargo, en los años posteriores su propio hermano soltó la versión de que en realidad habría fallecido debido a una reacción alérgica adversa desatada por pulverizarse accidentalmente un plaguicida en el jardín de su casa, justo el día antes que toda la familia planificaba una barbacoa, lo que unido a su dolencia cardiaca esa intoxicación fue lo que le causó el fulminante ataque al corazón. Antes de salir a la venta el disco Kingdom of Desire, el 5 de agosto de 1992, Porcaro fallecia en el Hospital de Humana-West Hills.
Porcaro fallecería prematuramente en un accidente el 5 de agosto de 1992, cuando sólo tenía 38 años de edad, mientras trabajaba en su jardín. Según publicaría el diario LA Times Report, la oficina del forense del condado de Los Ángeles catalogó la causa de su muerte como un ataque cardíaco debido al endurecimiento de las arterias causadas por el consumo de cocaína. Pero hubo más.