PERIQUITO PÉREZ: De rancheador y voluntario a héroe en Guantánamo

Pedro Agustín "Periquito" Pérez sentado a la izquierda

No sabemos porque los Cubanos le nombramos cuando nos referimos a cosas irrelevantes, superfluas, sobre todo cuando se trata de alguien que no requiere importancia. Sin embargo, tratándose del personaje real que llevó este mote, fue todo lo contrario. Para la historia de Cuba, el Guantanamero "Periquito Pérez" fue más importante de lo que muchos podríamos imaginar. 

Y tanto, que en 1898 este señor jugó un papel clave en esta última etapa libertadora. En una excelente muestra de coordinación táctica, las fuerzas cubanas bajo su mando desalojaron a las tropas españolas del Este de la bahía Guantanamera. La Bahía de Guantánamo fue un factor esencial en el suministro de alimentos, carbón y municiones para la flota de Estados Unidos durante aquella Guerra. 

Periquito fue quien dirigió un certero y sorpresivo ataque, previo al desembarco de 600 infantes de marina del ejército de Estados Unidos por aquella playa, guiados por el coronel del ejército libertador cubano Enrique Thomas y Thomas. Gracias a Periquito, a partir de ese momento la Marina de los Estados Unidos tuvo uno de los mejores puertos de Cuba para abastecer sus buques de guerra, en el prolongado bloqueo de Santiago de Cuba. 

La guarnición española se encontraba atrincherada en la ciudad de Guantánamo, a doce millas de la bahía, pero no desafió nuevamente el uso permanente de este enclave vital, lo que fue un grave error estratégico por parte del alto mando del Ejército Español.
 
Toma de Guantánamo el 12 de junio de 1898
De hecho Agustín "Periquito" Pérez, que como si fuera poco alcanzó los grados de mayor general, fue invitado de honor a bordo del crucero estadounidense “Marble Head”, donde los oficiales de la marina norteamericana mostraron su gratitud al coraje y cualidades del Ejercito Mambí. 

Sin embargo "Periquito" tuvo otro oficio del que no debió sentirse muy orgulloso que digamos. El oficio de Rancheador era muy mal mirado en la sociedad, entre otras cosas porque venía a ser una especie de mercenario al servicio de los esclavistas cuando se trataba de capturar a los negros esclavos en fuga y devolvérselos a sus amos. 

Periquito fue rancheador, y muy bueno además. Y lo curioso fue que estando al servicio de España, para la que servía como voluntario, un buen día llegó a entender que lo que hacía no estaba bien y que como si fuera poco, la libertad de Cuba sería entonces su prioridad. A tal efecto se alzó en armas y sin necesidad ninguna, pues su familia era muy rica.

Es más, durante la guerra de los 10 años se había incorporado a las fuerzas de su tío, el teniente coronel Miguel Pérez Céspedes, que junto a José Pérez Sánchez, eran dos de los "rancheadores*" de esclavos y de mambises también, más temidos y odiados de aquella zona.

En el caso de Pérez Céspedes, este había servido a España durante cincuenta y cuatro años, anulando durante décadas los elementos considerados como "perturbadores y peligrosos para la provincia, porque eso era Cuba para España, una provincia más.

Pérez Céspedes fue emboscado en Sabana Abajo, Lomas del Peladero, por un grupo de Cubanos que se supone fueran rebeldes. Muchas ganas le tenían, pues fue tal el ensañamiento que su cadáver quedó desfigurado por completo. Sus restos fueron recuperados y depositados en el nicho No 7 del panteón que que había sido erigido para los defensores de España en aquella localidad.

Mayor general Periquito Pérez
Existe un relato sobre su muerte que ha sido fruto del imaginario Cubano que es muy amplio. Se habló, y aún se sigue hablando, de un supuesto duelo entre Céspedes y el general Guillermón Moncada, pero todo indica que nunca se celebró. Es que no existe ningún documento que lo pruebe, excepto el periódico comunista cubano "Granma", que en cuestiones nacionalistas es capaz de sacarle chispas a un "tizón mojado".

Don Periquito Pérez aprendió el oficio de este tío, con lo cual demuestra que muchos de los mambises, santos no eran. Que su procedencia podría ser lo mismo de una rica y educada familia, que de un bandido asalta caminos o de un despreciado rancheado como fue este caso. 

Total que "Periquito" se incorpora a la huestes mambisas durante la guerra chiquita, para la que conspiró, y por la cual fue detenido y posteriormente encarcelado en la fortaleza del Morro de Santiago de Cuba, de donde logró escapar el 26 de diciembre de 1879.

Pero volviendo a la guerra Hispano- Cubana- Americana, Periquito se alza en armas nuevamente un 24 de Febrero de 1895 en la finca "La Confianza" junto al coronel Emilio Giró Odio, a quien ya conocía de la fracasada intentona anterior. Este Giró fue, al término de la guerra fue nombrado como  gobernador de Guantánamo.

A la caída de Santiago y la posterior rendición de las fuerzas Españolas, Periquito fue uno a los que se le vetó la entrada en aquella ciudad. Sin embargo llama la atención que fue también de los que aceptó después una invitación para recibir un homenaje en un buque norteamericano.

No solo eso, aceptó el ascenso a Mayor General del Ejército Libertador y estuvo de acuerdo que el gobernador militar estadounidense Leonard Wood cuando lo nombraron alcalde de la ciudad de Guantánamo, cargo que desempeñó y por el cual fue reelecto posteriormente.

Grupo de soldados Españoles prisioneros a la caída de Guantánamo
Este capítulo de nuestra historia ha sido uno de las grandes mal entendido y como tal manipulado según que intereses. Por supuesto que los Cubanos merecían estar presentes en la rendición de España, pero como les pasó a otros líderes, entre ellos el mayor general Calixto García, aquel veto había sido una petición expresa de España como condición para la rendición y Washington, con tal de darle un carpetazo cuanto antes a este asunto, la aceptó tal cual. De hecho aceptaron también que los oficiales españoles conservaran su sable durante la ceremonia

Aún así, el general Calixto sí fue invitado a la rendición de Guantánamo, otra cosa es que él no haya aceptado por encontrarse molesto. Así se lo hizo saber el general Shafter en una misiva que ya hemos publicado con anterioridad, y donde le explica además que esa decisión había venido de parte de su gobierno y que él, militar al fin, no podía ni discutirla siquiera.

Fragmento de aquella respuesta:

"En mi informe oficial al Gobierno, he hecho completa justicia a Ud. y a su valiente Ejército, y quiero expresarle el reconocimiento que hago de la gran ayuda y valiosa cooperación que usted me ha prestado en la actual campaña. Siento profundamente el saber su determinación de retirarse de estos alrededores. Recordará el hecho de haber sido invitado por mi para ir a la ciudad de Santiago, a presenciar la rendición, invitación que usted no aceptó".

Por su puesto en Washington igual entendieron que una rendición del ejército de España ante aquella tropa de rebeldes, hubiera sido demasiado humillante. De manera que aquel veto, que en un principio causó malestar entre aquellos jefes y soldados que habían apoyado y confiado en aquella invasión, al final entendieron que el precio de la libertad estaba por encima de todo y de todos.

Nota: RANCHEADOR: Persona, o grupo de personas, que se dedicaban a perseguir esclavos fugados al monte, los llamados apalencados, (no cimarrones) previo pago de los amos. Lo hacían ayudados de algunos colaboradores y de perros entrenados al efecto.
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