lunes, 18 de septiembre de 2023

Breve historia de los rifleros de la libertad

Rifleros Cubanos

Cerca de medio siglo había transcurrido desde la emancipación de las antiguas colonias españolas en el continente americano, sin embargo parecía que la metrópolis española no se daba cuenta que ese suceso modificaba las condiciones de todas sus  posesiones insulares y le imponía, por tanto, un cambio completo a su política colonial.

La participación bélica de los Canarios en Cuba es un tema complejo, puesto que lo que se entiende por un combatiente canario varía a partir de quienes se integraron en el Ejército Libertador, a los llamados voluntarios o milicianos pertenecientes a las numerosas fuerzas irregulares Españolas.

En ambos casos, se trató de emigrantes procedentes del Archipiélago que optaron por uno u otro bando. No obstante la participación isleña en el Ejército Libertador fue una participación aislada y excepcional, aunque algunos alcanzaron un alto rango jerárquico. El más «estrellado» de ellos fue el general Manuel Suárez Delgado.

Al inicio de la «Guerra Grande», según los cálculos de los historiadores cubanos Moreno Fraginals y Moreno Masó, casi el 25% de las tropas de «voluntarios» de La Habana y Matanzas estaban integradas por nativos de la Islas Canarias, y formaban entonces la primera región española por su intransigente «integrismo».

La también historiadora María Dolores Domingo Acebrón planteó que José Martí era de la opinión de que el gobierno español había logrado que la mayoría los canarios que habitaban en Cuba se opusieran a las aspiraciones de libertad, y por eso no brindaran su apoyo. Según esta historiadora, se calcula que hubo alrededor de 300 canarios en el ejército libertador cubano, (292 según relación del general Carlos Roloff) y una mucho más cuantiosa al ejército español.

Sin embargo, no cabe duda que la presencia de isleños en el ejercito libertador, aun siendo menor, significó un primer momento como la realización de la "nación soñada" por ellos, la misma que fue ideada por Martí, fraguada en los clubes del Partido Revolucionario Cubano y en la manigua, aunque no se concretó debido a la intervención militar norteamericana de 1898.

Por tanto cabría preguntarse si acaso traicionaron a España esos «mambises» canarios?. Sólo lo podrían pensar quienes ignoren el planteamiento martiano: «Los españoles buenos son cubanos».

Mayor general Tinerfeño (De la isla de Tenerife) Manuel Suárez Delgado.

Manuel Suárez nació el 7 de enero de 1834 en Santa Cruz de Tenerife, graduándose en la Academia Militar de Toledo y participando en la Campaña de África en 1860, donde recibió el grado de capitán. En 1861 fue destinado a prestar servicios en Cuba, pero abandonó la carrera militar y se estableció en La Habana. 

En 1864 viajó a París para retar a José Ferrer de Couto por las ofensas hechas por este hacia la colonia cubana en París. Al comenzar la Guerra de los Diez Años se trasladó a Nueva York, donde se identificó con la causa cubana, y organizó y entrenó además un batallón que denominó "Rifleros de la Libertad" 

En una carta de José Morales Lemus, ministro plenipotenciario de la República en Armas, dirigida a Carlos Manuel de Céspedes, general del Ejército Libertador y jefe del Gobierno Provisional, le informaba que la compañía organizada por Suárez estaba integrada por cubanos y que estaba armada de fusiles "Remington 76". 

A su mando viajó a Cuba con la expedición del «Perrit», que llegó a la Península del Ramón, en la costa norte de Oriente, el 11 de mayo de 1869. En 1871 pasó a Camagüey y participó, entre otros combates, en Palo Seco, Naranjo y en la conocida batalla de las Guasimas. 

En 1874 fue ascendido a general de Brigada y en febrero de 1875 se incorporó al Tercer Cuerpo del Ejército Libertador, en el que destacó por combatir en la Trocha de Júcaro a Morón. En la guerra del 1895 se incorporó al Ejército Libertador en abril de ese año. De febrero a junio de 1896, ocupó el cargo de jefe del Tercer Cuerpo del Ejército, en tanto que el 31 de diciembre del mismo año fue ascendido a mayor general. 

Entre 1898 y 1902, fue gobernador civil de Camagüey e inspector de Bienes del Estado, para abandonar la política y el ejercito en los años siguientes. Allí vivió con sus seis hijos, ya que su esposa había muerto, hasta que fue destituido por el generalísimo Máximo Gómez. 

Según Gómez, el general Suarez no se presentó al combate de Saratoga en Camagüey, el 11 de junio de 1896. En un artículo aparecido en la revista cubana Bohemia, firmado por V.S.A. se explica que entre febrero y junio de 1896
fue nombrado jefe del tercer cuerpo del ejército libertador,
en Camagüey. 

"Aquí, - dice Bohemia - su actitud
cambió mucho, la «pasividad»
se convirtió en la base de sus
actuaciones . El general Enrique
Loynaz del Castillo - padre de la
poetisa Dulce María Loynaz - se
refiere a los pormenores del combate de Saratoga
de 1896, en relación a la actitud del general Máximo
Gómez en los siguientes términos: 

«. . .Llegó al Cuartel General
el jefe del Tercer Cuerpo, mayor
general Manuel Suárez, a quien
el General en Jefe dirigió los
más violentos cargos, recibidos
con silenciosa resignación en
presencia del Ejército. La tremenda acusación no era infundada; el general Suárez, acampado tranquilamente con 200
hombres bien armados, había
oído durante tres días las descargas y cañonazos de la jornada de Saratoga sin acudir a ella,
la que con refuerzos tan importantes hubiera culminado en la completa derrota de la columna Española».

En 1908 su situación económica era precaria. 

En octubre de 1911 protestó en el Consejo Nacional de veteranos contra la permanencia en el gobierno cubano de lo que consideraba ex guerrilleros y traidores de la última guerra de la independencia. Durante la República vivió alejado de toda actividad política. Falleció el 3 de enero (otros dicen que el siete) de 1917 en la ciudad de Camagüey, a la edad de 76 años.

Relación de soldados que Menuel Suárez organizó en la ciudad de New York, el 7 de abril de 1869, y que estuvieron dispuestos a marchar a Cuba a incorporarse al ejercito libertador en la primera guerra, conocida como la de los 10 años. 

Estos hombres estaban armados con rifles Spencer, uniformados y municionados con 25.000 cartuchos, e instruidos en ejercicios militares por el capitán retirado don Manuel Suárez. Se agrega además que estaban todos conformes en admitir como jefe al que la Junta Central designase y como jefe supremo al ciudadano generalísimo Carlos Manuel de Céspedes. 

«Rifleros de la Libertad». Nueva York, 7 de abril de 1869. 

Médicos

  • Manuel Suárez 
  • Francisco Coppinger 
  • Horacio Simoni 
  • Antonio Luaces (Medico camagüeyano en EEUU)
  • Antonio Casanova 
  • Sebastián Amabile Correa (Santiaguero. Primera baja medica cubana en Bijarú, Báguanos, Cuba) 
  • Corneta: Antonio Durio

Rifleros Cubanos (llamados Mulatos)

  • Francisco Argüelles 
  • Vicente Cárdenas 
  •  Vicente Arnau 
  •  Casimiro Portillo 
  •  Emilio Espinosa 
  •  Federico Pages 
  •  Eduardo Ster 
  •  José Botella 
  •  Juan Benedetti 
  •  Eduardo Castro 
  •  Ángel Collado 
  •  Eduardo Lombart 
  •  Gaspar Escobar 
  •  Cayetano Abreu 
  •  Ricardo Sirven 
  •  Carlos Díaz 
  •  José Miguel Párraga 
  •  Martín Justiz 
  •  Julio Diviño 
  •  Martín García 
  •  José Manuel Ramos José Peña 
  •  José Francisco Sicre 
  •  José Bucelo 
  •  BIas Trujillo 
  •  Domingo Vélez 
  •  Manuel Limedux 
  •  José Valdés 
  •  Guillermo Smith 
  •  Manuel Noda 
  •  Silvestre Perera 
  •  Manuel Butrón 
  •  Manuel Ballesteros 
  •  Antonio Martín 
  •  Pedro Uviarreta 
  •  Emilio Yber 
  •  Guillermo Rynegch 
  •  Eduardo Abreu 
  •  Enrique Vázquez 
  •  Francisco Noda 
  •  Antonio María Leiva 
  •  Agustín Masvidal 
  •  Julián Lozano.

CANARIOS DESTACADOS EN EL EJERCITO LIBERTADOR 

General de división Matías Vega Alemán, Las Palmas 1861  Santiago de Cuba 1905. 

General de brigada Julián Santana Santana. Tenerife 1830, Las Tunas 1931. 

Brigadier Jacinto Hernández. Gran Canaria 12 de mayo de 1865 (¿1863?). La Habana 8 de Mayo de 1951. A su muerte, solo quedaban vivos seis generales de los 140 que formaron el cuerpo de mando superior en la insurrección. En la república fue el primer alcalde de Güines. Concluido su mandato se retiró a su finca para cultivar caña de azúcar.

Coronel José Fernández Mayato, jefe del regimiento de cárdenas en Matanzas. Nació en Tenerife en el año 1868. Fue de los heroicos bomberos que apagaron el terrible fuego en la ferretería Isasi en Matanzas el 17 de mayo de 1890, un siniestro que se cobró la vida de 28 de sus compañeros. Hoy ostentan el mayor monumento que existe en el cementerio de Colón en la Habana. En 1902 ocupó la jefatura de bomberos de la Habana

Otros Canarios conocidos en las filas insurrectas fueron el comandante Ruperto Fernández Mayato, el coronel Juan Pino, teniente coronel Daniel Tabares, los soldados Francisco Escobar, Luciano Galván, José Jiménez y Miguel Álvarez, estos dos últimos fueron fusilados en Matanzas en noviembre de 1896. El ultimo mambí canario que falleció fue Antonio León Hernández, hombre al servicio del general Antonio Maceo, incorporado en Crimea en 1895, que falleció en la década de los 60. 

Claro que hubo de otras regiones, Asturianos como José Santeiro y Mamerto Pérez, Gallegos como el coronel José Álvarez Pérez y teniente coronel Antonio Castro Belo, el vizcaíno Pedro Campos o Andaluces como Juan Gallardo y Manuel Ruiz, aunque en menor medida que los isleños. Según el citado artículo de Bohemia, se advierte que es complicado precisar una cifra, pero reconoce que un 43,2% de los españoles caídos en las filas insurrectas fueron canarios.

Maldita Hemeroteca

Fuente: La Brigada de Cárdenas, de Nelson López, José Fernández y Manuel de Paz. // Revista Bohemia. // Canarios en las luchas emancipadoras de Cuba, de Alfredo Martín. En la relación de Rifleros, Colección Manuscritos Ponce, No 217. Biblioteca Nacional José Martí de La Habana, aparece en la misma Colección de Manuscritos, pero con el No 412, un nombre menos (Guillermo Smith). 

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