Por increíble que parezca la Selección de futbol Cubana formó parte de los 15 países que participaron en el mundial de futbol Francia 1938, y no solo eso, llegó a disputar la ronda de cuartos de final. El formato del certamen era distinto, pero ahí estuvieron los caribeños que se beneficiaron por la ausencia de México, Costa Rica, El Salvador, Estados Unidos y Guyana holandesa, quienes se retiraron durante la fase eliminatoria.
Todas las selecciones del continente americano renunciaron con la excepción de Brasil, y lo hicieron como protesta pues la FIFA había dicho que alternaría la sede de este evento entre América y Europa, una promesa que no cumplió, ya que el mundial anterior (1934) se había celebrado en Italia.
Entonces las selecciones participantes fueron: Italia, Hungría, Brasil, Suecia, Checoslovaquia, Suiza, Francia, Rumania, Alemania, Polonia, Noruega, Bélgica, Holanda, Cuba, Indonesia y Austria, aunque esta última no llegó a participar, ya que fue adherida al régimen nazi sólo unos meses antes de comenzar la justa.
En el torneo no existió fase de grupos y todo se definió desde la eliminación directa, así que el debut del cuadro cubano se dio en los octavos del 5 de junio ante Rumania, en un partido celebrado en el estadio Chapou de Toulouse. El duelo terminó con un empate a tres goles. Por Cuba anotó Héctor Socorro en dos oportunidades (44’ y 103’) y José Magrina (69’); por Rumania lo hicieron Silviu Bineda (35’), Iuliu Baratky (88’) y Stefan Dobay (105’).
Debido a que permaneció la igualada en los tiempos extra y no había definición por penaltis, se tuvo que jugar un partido de desempate el 9 de junio y que terminó con triunfo para el equipo caribeño. En ese encuentro anotó Héctor Socorro (51’) y Tomás Fernández (57’) luego de que los europeos se habían ido al frente con un tanto de Stefan Dobay (35’).
Con este resultado de 2-1, Cuba hizo historia, pues se convirtió en el primer país del caribe que dejó atrás la primera ronda de eliminación directa de la Copa del Mundo. Ya en los cuartos de final, el equipo cubano no tuvo el mismo éxito y fue goleado 8-0 por Suecia, en un partido celebrado el 12 de junio en el estadio Fort Carreé, de Antibes.
Así terminó la única aparición de Cuba en una Copa del Mundo, con una victoria, un empate y una derrota que dejaron como saldo cinco goles a favor y 12 en contra. Al final Italia se coronó bicampeón tras vencer en la final a Hungría con marcador final de 4 goles a 2.