![]() |
| Foto referencial. |
Un día como hoy, 5 de octubre, pero del año 1885, nació José Rosario Oviedo, y quizás no le diga nada su nombre, pero que tal si agregamos que era un rumbero al que llamaban "Malanga" y que era de Unión de Reyes, entonces sí.
"El día que Malanga murió toda Unión de Reyes lloró", así dice la famoso tema que le hace homenaje. Malanga nació de una madre esclava del ingenio "La Esperanza", en Alacranes, un pueblo de Unión de Reyes en la provincia de Matanzas. Cuando joven se convirtió en un excelente bailarín de rumba, yambú, columbia y todos esos géneros afrocubanos típicos de aquella zona.
La historia cuenta que era tan bueno en el baile que rivales del oficio se sintieron celosos, sobre todo aquellos a los que le hizo especial competencia y que decidieron un día acabar con su vida. Se dice que asistió a una fiesta de santos celebrada en Ceballos, provincia de Ciego de Ávila, pero el día antes había dado una cátedra de baile en una competencia en la que derrotó a dos connotados bailarines locales, "Chenche" y "Mulense".
En la celebración, alguien le pasó un plato de arroz con carne de cerdo y quimbombó, supuestamente envenenado con vidrio molido, que acabó con su vida fulminantemente. Era el año 1927, y Malanga contaba entonces con 41 años. Pasó a la historia como uno de los mejores bailarines de Cuba de este género, si no el mejor. Aseguran que tenía la particularidad de bailar con un vaso de ron en la cabeza, y sin derramar ni una gota.
Un percusionista y otro bailarín locales, José Drake y Félix Chapé, compusieron la famosa rumba que fue inmortalizada por músicos del calibre de Chano Pozo, Arsenio Rodríguez, Carlos Embale, Cheo Belen Puig, Senén Suarez o Miguelito Valdés, estrenada durante un homenaje ofrecido al cuarto año de su muerte. Desde entonces, la celebridad de Malanga ha perdurado hasta nuestros días.
Maldita Hemeroteca






