miércoles, 11 de septiembre de 2024

De guatacas y apapipios.

¿Apapipios o en este caso fervientes revolucionarios?

Para nadie es ya un secreto que tanto el movimiento 26 de julio, la Federación Estudiantil Universitaria y su brazo armado en el Directorio, fueron dos fuerzas que se disputaban el protagonismo de la lucha contra el régimen de Fulgencio Batista, empleando el terrorismo más violento que se haya conocido en Cuba en muchos años.

Si no le agrada este término, entonces... ¿cómo le llamarían hoy a la colocación de petardos en las escuelas, voladuras de transformadores que dejaban sin electricidad a gran parte de la población, a la colocación de bombas en los cines y centros nocturnos, en acueductos, a la quema de autobuses e incluso a la intención de volar un túnel altamente transitado como el que unía a Marianao con la Habana?.

Estas, entre muchas otras, fueron el centro de sus actividades anti Batistianas. Incluso llegaron a subir la parada con asesinatos de agentes del orden y de vigilancia, de importantes políticos, o como aquel terrible secuestro de la nave aérea siniestrada en la Bahía de Nipe, en noviembre del 1958, donde murieron 17 personas entre ellas varios niños.

Los que conocen de estos temas han dicho que si la acción del trece de marzo de 1957, diseñada para asesinar al mandatario, dictador o como quiera usted llamarle, Fulgencio Batista, no llegó a ser más contundente, fue por las intrigas de Faure Chaumon a espalda de su líder José Antonio Echeverría, lo que hizo que otros importantes grupos que debían participar en la acción, como los dirigidos por Jorge Vals, Ramón Rodríguez Milián, Willy Morales, Calixto Sánchez Whyte y Osvaldo Révola, se quedaran fuera de la ecuación. 

No lo sé, pero si lo dicen ellos por algo será. Incluso, más allá y que aún continúa siendo un misterio, ¿como fue posible que el propio Chaumón, (Chomón) como Raúl Díaz Arguelles, pudieran escapar ilesos de las garras del coronel Esteban Ventura Novo en el edificio Humboldt?. Por el contrario, dejaron abandonaron a los que luego fueron masacrados, Juan Pedro Carbó Serviá, Fructuoso Rodriguez, José Machado y Joe Wesbrook que, sumados con los habían caído ya, llegaron a   29 muertos.

Este temerario asalto, que como se puede apreciar no fue obra de la gente del 26 de Julio si no del grupo rival auténtico universitario, ha sido considerada como una heroicidad de aquellos jóvenes, que lo fue sin ninguna duda a pesar de todo. Pero más allá de todo esto, hay algo que no se ha dicho y que fuera publicado por el periódico norteamericano New York Times, que de hecho fue uno de los que jugó un papel clave en la propaganda Castrista en la Sierra Maestra. 

Veamos...

LA HABANA, 7 de abril — 
R. Hart Phillips, enviado especial en la Habana para el New York Times.

Miles de personas marcharon al Palacio Presidencial esta tarde para manifestar su apoyo al presidente Fulgencio Batista. Representantes del trabajo, comercio, industria, gobierno, partidos políticos y simpatizantes de la Administración, llenaron el parque frente al palacio y todas las calles adyacentes. 

¿Apapipios?, ¿Verdad Ciro Bianchi?

Pancartas y pancartas que llevaban los manifestantes proclamaban la aprobación de las políticas del general Batista, su programa de obras públicas y sus esfuerzos por reprimir las actividades revolucionarias de sus enemigos. Una pancarta grande decía: "Por Batista, en el pasado, ahora y para siempre". “Quinientos residentes estadounidenses de la Isla de Pinos tienen fe en Batista”. 

La nota clave de la manifestación fue la “Paz”. Se soltaron bandadas de palomas blancas durante la manifestación para significar esa demanda de paz. El Gobierno adoptó medidas de precaución para proteger a los manifestantes. Policías armados con rifles rodearon el palacio. En todos los tejados cercanos había policías y soldados armados con rifles y ametralladoras-.

Como se puede apreciar en la imagen, algunas de las pancartas que aparecen enarboladas son de la C.T.C. (la Central de trabajadores Cubanos) que en esa década tenía más de un millón de trabajadores sindicalizados, cuando en la isla habían 6 millones de habitantes. No sé, digo yo. 

Sin ir más lejos, ese mismo año de 1957, la central de trabajadores de Cuba había llegado a un acuerdo para la firma de un convenio laboral donde se reducirían las horas de vuelos de los pilotos y mejorarían sus salarios. Ese acuerdo fue firmado por Calixto Sánchez Whyte, secretario de la federación aérea, entre otros sindicalistas, y que sepamos Calixto no era ningún Batistiano, todo lo contrario, conspiró en su contra e incluso llegó a transportar revolucionarios desde los Estados Unidos.

No solo eso, se le vinculó de cierta forma con los planes para acabar con la vida del dictador en aquel atentado a Palacio del 13 de marzo. Otra cosa es que venga alguien ahora y nos quiera "explicar", que en aquellos años la C.T.C. era una organización sindical corrupta porque sus lideres, como los del Partido Socialista Popular, creían que la violencia y la lucha armada no era el camino adecuado para conseguir el retorno de la democracia en Cuba. 

¡Menuda forma de contar la historia! 

Después de ver esta nota, y su incuestionable imagen que la rubrica, ¿cómo catalogaría usted que los empresarios y personalidades que fueron a expresarle al presidente, tirano o lo que haya sido, su rechazo y condena por el atentado, hayan sido calificados por este historiador de "apapipios". Sí, porque así fue como les llamó en el medio oficialista online "Cubadebate", que de eso, de debatir precisamente, entiende y permite muy poco. 

"Batista comenzó a recibir el desagravio de las corporaciones económicas, la industria, el alto comercio, las asociaciones de profesionales… A eso los Apapipios le llamaron “el segundo asalto a Palacio. Visitas que culminaron el 7 de abril con un acto de guataquería insuperable frente a la terraza Norte".

Probablemente el señor Bianchi no haya tenido acceso a esta foto, lo que dudo muchísimo, está muy fácil en la internet, o en su lugar haya confiado en la poca información que disponen sus lectores que, tan generosamente sacrifican sus escasos megas en leer semejante mentira. Bianchi afirma que aquella manifestación de "guataquería insuperable", llegó al fin gracias a los petardos que colocó Sergio Gonzáles "el curita", dígase el mayor terrorista que había en toda Cuba por aquellos años. 

Sin palabras.

¿Sabe usted cual es el significado que le da la R.A.E. a APAPIPIO, haciendo la salvedad que es de uso cubano?: 

Apapipio, pia . adj.... Cuba. Delator o confidente. Ú. t. c. s

"El que denuncia a la autoridad lo que hacen otros, el confidente del gobierno, el chota, el soplón, el denunciante al servicio de una dictadura",
O sea, términos que sin ninguna duda el señor Bianchi conoce muy bien. Una pena que alguien tan "historiado e ilustrado" como este señor, tan esperado disfrute del pueblo cada domingo en su columna del "Juventud Rebelde", se preste para hablar tanta tontería, por no decir tanta mierda. Líbrenos dios de este historiador en la próxima etapa, porque vendrá, que no le queda ninguna duda, le guste o no. 

Por Jorge García.
Maldita Hemeroteca 

SECCIONES/RELACIONADAS