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| Hospital Materno de Marianao. Inaugurado el 20 de septiembre de 1941 por el entonces presidente electo Fulgencio Batista. // |
Sabías que entre la parroquia de Marianao y lo que queda del cine Principal, había un barrio que se llamó "La Isabela". Fue el segundo que se creó en los Quemados, por el gran benefactor de nuestro barrio, el catalán Salvador Samá y Martí, Marqués de Marianao y coronel de milicias, allá por el año 1858.
Un detalle sin precisar aún, la primera calle que se edificó en Marianao llevó el nombre de Samá, aunque luego le pusieron el de María Montalvo el de la condesa de Merlin suponemos, porque la otra Montalvo famosa fue su sobrina y esposa del rey del azúcar Don Julio Lobo, la señora María Montalvo y Lasa.
En esa calle radicaba la mansión del señor Miguel de Cárdenas y Peñalver, Marqués de Campo Florido y propietario del central "Tivo Tivo", en el corral de Guanabo, que se terminó en 1851. En ese tiempo solo había en los Quemados cincuenta casas de mampostería, veinte de tablas, veintidós de guano y trescientos catorce habitantes. Para 1943, ya los Quemados había crecido hasta los 20,823 residentes.
REGRESANDO A LAS CALLES....
Por otro lado, San Francisco, que más tarde se llamó Martí es hoy 49, en tanto que San Federico, luego Rosendo Collazo, era la actual avenida 47, mientras que más abajo en 45, que se llamó Dolores, pero luego fue renombrada como Steinhart. (se pronuncia estinjar). Este era el apellido del magnate Frank Steinhart, uno de los americanos que urbanizaron el country club y que era dueño asociado del Jockey Club y el Casino Nacional. Incluso, operó por muchos años las carreras de caballos en el hipódromo Oriental Park de Marianao.
Total que esta parcelación dio por resultado los trazados de ampliaciones y nuevas vías en el barrio de los Quemados, como fueron la ave 49, la calle 116 y la misma avenida 51, que por entonces se nombraban San Francisco, Rey y Camino Real de Vuelta Abajo, respectivamente, un terraplén que iba en dirección a Pinar del Río, atravesando lo que sería hoy los poblados de la Lisa, Arroyo Arenas, Punta Brava, Bauta, Guanajay y Artemisa, hasta cruzar por Candelaria.
--La Plaza Cívica José Martí - ubicada al centro de la calle 124 - y el monumento a Máximo Gómez en la esquinita de 51 y 124, fueron inaugurados en 1955 y 1958, respectivamente, por el alcalde Francisco Orúe.--
Por su parte la calle Campa y luego Infanta, es hoy la avenida 43, Panorama sería 41 y Concepción 37. Ahora bien, las calles Norte era el nombre de 112, Príncipe de Asturias y después Adolfo del Castillo era 118, Maceo 116, Santa Lucía sería la Calle 134, Luisa Quijano 130 y Carvajal, rebautizada como General Lee, 114.
Este era el apellido del cónsul de Estados Unidos en la Habana, Mr Fitzhugh Lee, sobrino del general Robert E. Lee, en los momentos en que el buque USS Maine volaba por los aires en la bahía Habanera el quince de febrero de 1898, y que diera inicio a la guerra entre España y Estados Unidos.
La calle Paseo, como la llamaban nuestros padres, incluso nosotros cuando niños, sería hoy la espaciosa 124, que en un principio se le iba a poner el nombre del presidente de Cuba en armas, Salvador Cisneros. Y aunque tuvo el visto bueno del alcalde Baldomero Acosta, luego se llamó Progreso, quedando Cisneros relegada solo al tramo comprendido entre Calzada de Máximo Gómez y la calle Martí osea, entre las avenidas 51 y 49, a un costado de la "Casa de Socorros".
La famosa calle 100 que corta Marianao en dos, toda la vida se se llamó "General Menocal", y a la altura de la avenida 59 vivía Francisco "Panchín" Batista, hermano de Fulgencio, quien fuera alcalde de Marianao por el Partido Acción Unitaria Progresista y un magnate de los bienes raíces en aquel barrio.
Por otro lado, en esa avenida 100, pero a la altura de la calle 98, como quien va en dirección a Pogolotti, vivió hasta su muerte el que fuera general del ejercito cubano Gregorio Querejeta Valdés. Fue el primer general de raza negra en la década del 40 y un militar de honor. Puso fin a la balacera ocurrida el 15 de septiembre de 1947 en la residencia del comandante de la policía de Marianao, Morín Dopico, situada en la calle Orfila del reparto Benítez, en Marianao.
Un punto de encuentro muy famoso en el siglo XIX fue la panadería "El Roble", que según el libro "Historia del Distrito Municipal de Marianao" de José F. Rodriguez, existe en los Quemados desde 1835. Fue fundada por el señor Andrés Amis en el numero nueve de la calle Príncipe Asturias, luego Adolfo del Castillo, convergente con la calzada Real, o sea, el cruce de 114 y 51. En 1884 pasó en propiedad a un señor de apellido Iglesias, hasta que en 1889 la adquirió el emigrante asturiano Don José Suárez Solís.
Nos vamos con un capítulo bien feo de nuestra barrio. Ocurrió el 13 de marzo de 1905, cuando fue condenado a muerte un niño de apenas 13 años. Pues sí, aunque parezca increíble, este niño fue protagonista de un hecho terrible que conmovió a todo Marianao. Residente en la Lisa y de nombre Juan Capín, lanzó desde lo alto del puente a su primo José Pérez de solo 11 años. Fue declarado culpable de asesinato y condenado a morir en el garrote vil. Desconocemos si se llevó a cabo semejante ejecución, tan atroz como el delito mismo.
Más información: Ver el plano antiguo de Marianao aquí en ese enlace subrayado.
Maldita Hemeroteca.
