Primero se exilió en la República Dominicana, donde no fue recibido muy bien que digamos, y es entonces que decide enviar a toda su familia a Portugal, donde el entonces dictador Antonio de Oliveira Salazar le ofreció protección.
Fulgencio Batista y Zaldívar se instaló en la tranquila y paradisíaca isla de Madeira y, más tarde, en Estoril. Aunque donde encontró su verdadero refugio fue en España, al abrigo de Franco, con lo cual se compró una vivienda en Madrid y otra en Marbella, donde solía veranear, y donde la muerte le sorprendió un seis de agosto de 1973, tras darse un atracón de mariscos la noche anterior en la villa de Guadalmina, en la Costa del Sol Marbellí.
Rubén comunicó que el cadáver de su padre sería trasladado a las siete de la mañana del martes siete de agosto, en un vuelo chárter a Madrid, y que tras la misa los restos serían trasladados al cementerio sacramental de esa ciudad, "San Isidro", para ser inhumado en el mismo lugar donde ya se encontraba su hermano Carlos Manuel, un estudiante de derecho de diecinueve años que había muerto en 1969 debido a una complicada enfermedad.
El sarcófago, envuelto en la bandera cubana, partió a las cinco de la tarde de la iglesia, cerrando definitivamente el capitulo de en la vida de uno de los hombres más importantes de nuestra historia en el ultimo siglo, con sus luces y sus sombras, y le guste a usted o no.
Tanto fue así que, citando al economista Carmelo Mesa-Lago -catedrático de Economía y Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Pittsburgh, de aquella Cuba que huyó en 1958. el 76% de la población sabía leer y escribir, osea la cuarta posición de América Latina en ese rubro educacional, mientras que un año antes ocupaba el primer lugar de la región con menor mortalidad infantil y con mayor número de médicos y camas en los hospitales por habitantes.
De lo económico mejor ni hablamos, teniendo en cuenta lo que queda hoy de aquella Cuba. Sí les dejamos claro un par de datos, y es que el Producto Interno Bruto por habitante de Cuba se colocaba en tercer lugar de la región, solo superado por Venezuela y Uruguay, mientras que la tasa de inflación de ese año - lea bien - estaba casi cero.









