sábado, 22 de abril de 2023

A 23 años de una imagen que le dio la vuelta al mundo.

Donato Dalrymple, el pescador que rescató a Elian, muestra la foto de lo ocurrido ese día en casa de los tíos del niño en Miami

Hoy se cumplen 23 años de que agentes del FBI sacaran por fuerza de la casa de sus familiares en la ciudad de Miami, al niño Elian González Brotón. Aquella imagen, con los agentes armados y enmascarados, así como el terror reflejado en la cara del niño, recorrieron el mundo de punta a cabo.

El niño Elián había salido de Cuba en una balsa junto a su madre y su padrastro, el 24 de noviembre de 1999. Su destino era Miami, donde se reunirían con familiares ya instalados allí que, de igual manera, habían huido del régimen castrista unos años antes. Entonces sucedió la desgracia.

La embarcación naufragó muriendo ahogados todos sus tripulantes, a excepción de Arianne Horta, Nivaldo Fernández y el niño, que milagrosamente su madre había colocado en un neumático bien sujeto antes de ahogarse. El chico fue rescatado por el pescador norteamericano Donato Dalrymple, al divisarlo dos días después flotando en medio del océano y a la altura de Fort Lauderdale.

La comunidad Cubana hizo todo lo que pudo por evitar el regreso del niño Elian a Cuba. 

A partir de ese momento Elian pasó a vivir con sus familiares de Miami, pero a partir de ese momento también el caso comenzó a politizarse y el niño pasó a convertirse en símbolo de las diferencias entre la comunidad Cubana de esa ciudad y la dictadura Castrista e incluso más, pasó a ser parte del viejo diferendo entre las dos naciones. 

Desde la isla, y bajo el argumento del regreso tutelado por el padre al haber muerto la madre, a Castro le vino que ni pintado para su particular lucha contra "el imperialismo yankee". El dictador veía los derechos del crío y su posible regreso no como un asunto legal y humanitario, si no como una de sus victorias personales y a eso se dedicó casi por entero.

Por su parte desde Miami, con el argumento de que aquel había sido el deseo de su madre al intentar sacarlo de Cuba, y que ya Elian vivía con sus familiares de esa ciudad con lo cual tendría un mayor bienestar, la comunidad cubana lo configuró en su lucha contra el régimen castrista.

Su tío abuelo Delfín González

El 22 de abril del 2000, de madrugada, agentes federales penetraron por la fuerza en el domicilio de los familiares de Elian, en concreto el de Juan Miguel González, tío del padre y tío abuelo del niño, donde vivía desde noviembre del 1999. Dos docenas de agentes fuertemente armados irrumpieron bien temprano en el domicilio y, por la fuerza, se lo llevaron. Precisamente Dalrymple era quien lo tenía escondido en uno de los closet de la casa.

Los federales llevaban los rostros cubiertos con pasamontañas y, tras obligar a voces a las personas que rodeaban el domicilio de los González a franquearles el paso, derribaron la puerta en una operación relámpago.

Una agente de civil sacó en brazos al pequeño niño y lo introdujo en un automóvil, al que subieron otros agentes fuertemente armados custodiando. 

La acción de los federales despertó una reacción unánime de rechazo en centenares de cubanos que se reunieron en torno a la casa, y que al grito de "Asesinos", fueron dispersos con gases lacrimógenos.

El niño fue traslado en un helicóptero a la base aérea de Homestead, al sur de Miami, y de ahí en un avión hacia Washington donde le esperaba su padre.

Mientras tanto la policía mantenía acordonadas todas las calles que rodeaban la casa de Lázaro González, entre la 23 avenida y la segunda calle del northwest, para evitar así cualquier incidente con el exilio cubano que continuaba protestando. La orden, salida del despacho oval por el presidente Bill Clinton, fue sentenciada por Janet Reno, entonces fiscal general del estado. 

Elian ya de regreso en Cuba. Castro se convirtió en padrino político del niño

No obstante un tribunal de apelaciones de la ciudad de Atlanta decidió que el niño Elián no podía salir de los Estados Unidos, hasta tanto no se resolviera la apelación hecha por Lázaro González en contra del fallo de un juez federal que había ordenado su regreso a Cuba. Como resultó al final. 

Elian regresó finalmente a Cuba con su padre, mientras que aquella terrible imagen de los Federales invadiendo la casa de Miami y captada por el fotógrafo Alan García, de "Associated Press", sería premiada un año después con un "Pulitzer". 

Por otro lado la locura de Castro le llevó a crear un museo en la ciudad de Cárdenas, pueblo natal del niño, situado a unos 150 kilómetros de la capital cubana, al que le puso por nombre “Museo de la Batalla de Ideas”, dedicando una sala a su gesta particular por la custodia de Elián. Ahora bien, del dinero del pueblo cubano gastado en los abogados americanos durante los juicios y apelaciones  ... bien gracias.

Maldita Hemeroteca 

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