A 66 años de la masacre de Humboldt 7 y el misterio aun perdura
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| Tarja de bronce colocada en la fachada del edificio de la calle Humboldt en la Habana. |
Cuatro dirigentes del directorio revolucionario universitario "13 de marzo" en Cuba, fueron masacrados por la Policía, en represalia por haber participado en un intento de asesinato del presidente de facto Fulgencio Batista.
El hecho, ocurrido un 20 de abril de 1957 en un edificio de la calle Humboldt número 7, en la Habana, cayeron masacrados sus integrantes Fructuoso Rodríguez y Joe Westbrook, participantes junto al líder del movimiento, José Antonio Echeverría, en la toma de la emisora "Radio Reloj" de donde erróneamente se comunicó al pueblo la ejecución de Batista, mientras que Juan Pedro Carbó Serviá y José Machado sí habían participado en el intento de asesinato en el palacio presidencial.
Sorprendidos y rodeados, los cuatro jóvenes que ocupaban el apartamento 201 de ese edificio, no tuvieron opciones de escapar y, al intentar defenderse, fueron masacrados por la policía. En principio el castrismo se encargó de "regar la bola" de que habían sido delatados por un militante de una filial juvenil de partido comunista de nombre Marcos Rodríguez, señalándolo como el supuesto colaborador de la Policía, sin embargo con los años varios analistas e historiadores cubanos la han ido desechando.
En marzo del 1964, este Marcos fue juzgado y condenado a muerte en un juicio que fue emitido por la TV cubana. Por otro lado existe una versión de que sí existió "el chivatazo", por un supuesto despacho de presidencia, firmado por el coronel de la policía Esteban Ventura Novo quien dirigió la operación, donde se hacía constar "el pago por los servicios prestados" a un delator.
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| Marcos Rodríguez en el juicio en la Habana |
E incluso otra versión apuntó hacia dos policías que participaron en los hechos y que se encontraban presos, ratificaron mediante fotos mostradas por la señora Marta Jiménez, viuda del asesinado Fructuoso, la participación del tal Marcos en los hechos. Estos policías, de apellidos Mirabal y Alfaro Sierra, también fueron pasado por las armas a los pocos días.
Esta señora, que falleció en marzo del 2016, intentó con todas sus fuerzas demostrar quien, o quienes, tuvieron responsabilidad en aquella muerte, sin embargo creemos que murió sin saberlo a ciencia cierta. Existe un documental, "Los amagos de Saturno", que da varias pistas interesantes e inquietantes a la vez, pero que lejos de concluir lo que hace es agregar más "leña al fuego" y, en nuestra opinión, de forma tendenciosa además.
Según dijo, todo se debió a declaraciones suyas a raíz de la fuga de la hija de Fidel Castro, Alina Fernández Revuelta, en 1993. Total, que si hay algo de cierto en todo esto es que no sabríamos decir si el dios romano se comió a sus hijos, lo que siempre nos ha quedado claro es que el Castrismo no perdona ni a sus propios mártires.
Maldita Hemeroteca
