Pequeña historia del Montmatre Cubano
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| Incendio del restaurante "Moscú". |
En sus inicios este céntrico edificio habanero había sido un salón de exposiciones de la marca de autos norteamericana Dodge, sin embargo el ciclón del 1926 le produjo graves daños, con lo cual se instaló allí un cinódromo.
El propietario de ese edificio, cabaret incluido, era el empresario Efrén de Jesús de Pertierra Liñero, quien era también dueño del restaurante "Monseñor", de la avenida 21 y calle O en el vedado, famoso local inaugurado el 13 de diciembre de 1957, del Frontón Jai-Alai y de la Compañía de Espectáculos Habana.
Era hijo del rico comerciante de habanos y congresista Indalecio Pertierra; el dueño del Jockey´s Club, mientras que sus hermanos tenían acciones como propietarios del club de beisbol de la liga profesional local, "Alacranes del Almendares". Remodelado con un estilo francés, en diciembre de 1940 se inaugura el lujoso club nocturno "Montmatre", de ahí su nombre, con artistas de primerísimo nivel.
ATENTADO
El 27 de octubre de 1956 fallecía en el hospital militar de Marianao el teniente coronel Antonio Blanco Rico. Había sido víctima de un atentado cometido por miembros del directorio revolucionario estudiantil "13 de Marzo", un grupo terrorista bastante activo contra el gobernante Fulgencio Batista en la década del 50.
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| Teniente coronel Antonio Blanco Rico |
Blanco Rico, que en ese momento ocupaba el cargo de jefe del Servicio de Inteligencia Militar, SIM, fue ultimado en la madrugada del día 28 en este prestigioso night club habanero, situado en la intercepción de las calles P y 23 en el barrio del Vedado. El comando estaba integrado por Juan Pedro Carbó Serviá, Miguel Ángel Domínguez, José Fernández Cossío y Rolando Cúbela Secádes.
No pocos aseguraron que el teniente coronel Rico era un militar de honor, e incluso nos llama la atención que la wikipedia castrista, "Ecured", tampoco le señala como "esbirro Batistiano" en su escueta descripción, lo que demuestra que esta acción fue totalmente injustificada, si es que se le puede llamar de ese modo a tan atroz y absurdo asesinato. Lo único que conseguía era caldear más el ambiente.
Los otros militares, Orlando Piedra y el ayudante de Tabernilla, Rodriguez Sanpedro, resultaron ilesos de milagro, en tanto que el otro de los terroristas, Miguel Ángel Domínguez, agitaba una granada mientras escapaban por la escalera del fondo hacia el auto que aguardaba en la calle Humboldt conducido por José Cossío.
La reacción no se hizo esperar. El capitán Rodríguez Sampedro identificó a Carbó Serviá en fotos del archivo policial, mientras que el jefe de la Policía Nacional, el general Rafael Salas Cañizares y el coronel del mismo cuerpo Conrado Carratalá Ugalde, se personaron en la embajada de Haití, en 7ma avenida y la calle 20, en la barriada de Miramar, en busca del autor de los disparos.
Rolando Cubela regresó a Cuba el 8 de febrero de 1958 por la costa de Nuevitas, alzándose posteriormente en la sierra del Escambray, sede de este grupo faccioso, contrario al 26 de julio de Fidel Castro en la Sierra Maestra, pero coincidente en el mismo objetivo contra el golpista Batista.
Con el tiempo el ya ex comandante se convirtió en opositor a Fidel Castro, e incluso fue acusado de un intento contra su vida. Se dijo que la CIA le había proporcionado un bolígrafo con un veneno mortal, que sería administrado mediante una imperceptible aguja. Esta acción resultó aplazada al coincidir con asesinato del presidente de los EEUU, John Fitzgerald Kennedy.
DOS HECHOS CURIOSOS
Por el supuesto atentado contra Fidel Castro, Cubela fue sentenciado a 25 años de prisión de los cuales solo cumplió 13. Fue liberado en 1979 en medio de un proceso de excarcelación de varios prisioneros políticos, pudiendo viajar España donde ejerció durante años su profesión de médico. Pero lo curioso fue que la revalidación de este título fue firmada por el mismísimo Rey Juan Carlos I.
En los años 70 el castrismo convirtió aquel mítico local de P y 23 en el restaurante "MOSCÚ", del cual hoy no quedan si no ruinas. En 1989 fue devastado por un incendio que lo consumió por completo y que, según se dijo, se había originado en una empresa de abastecimiento al turismo situado a los bajos, aunque en realidad nunca se llegó a saber las verdaderas causas. En 2022 fue demolido por completo. .JPG) |
| Entierro del general Rafael Salas Cañizares 1956 |
La reacción no se hizo esperar. El capitán Rodríguez Sampedro identificó a Carbó Serviá en fotos del archivo policial, mientras que el jefe de la Policía Nacional, el general Rafael Salas Cañizares y el coronel del mismo cuerpo Conrado Carratalá Ugalde, se personaron en la embajada de Haití, en 7ma avenida y la calle 20, en la barriada de Miramar, en busca del autor de los disparos.
En esta sede se encontraban esperando asilo diez miembros de estos grupos contra Batista, entre ellos seis asaltantes del cuartel Goicuría, elementos al servicio del partido "Auténtico" y de la llamada "Triple AAA" en la provincia de Matanzas, mientras que otros se habían refugiado luego de haber atentado contra la vida del senador Rolando Masferrer.
Salas Cañizares, que pensó que entre ellos se encontraba Carbó Serviá, irrumpió en la sede diplomática aniquilando a varios de ellos que iniciaron los disparos. Sin embargo uno de los heridos, Secundino Martínez Sánchez, alias el guajiro, aún con vida y portador de un arma de fuego, aprovechó que Cañizares se aproximó y le propinó cinco balazos desde el suelo, cuatro le pegaron a Cañizares en el bajo vientre, y otro le rozó en la cabeza. Otros dos tenientes de la policía resultaron heridos de menor gravedad.
En total fueron cuatro los cadáveres que sacaron del recinto diplomático. Por otro lado Rolando Cubela y Gustavo Machín consiguieron escapar de Cuba, embarcándose en el "Lake Charles" rumbo a los Estados Unidos. El propio Batista había declarado públicamente que el origen de estos grupos era financiado por el depuesto presidente Carlos Prío Socarrás.
De este comando Juan Pedro Carbó Serviá resultó muerto el 20 de abril de 1957 en la matanza del edificio de la calle Humboldt No 7, curiosamente muy cerca del cabaret, donde se encontraba oculto tras haber participado en otro intento de asesinato contra Fulgencio Batista en la sede del palacio presidencial.
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| Cubela en Madrid con corbata roja |
Rolando Cubela regresó a Cuba el 8 de febrero de 1958 por la costa de Nuevitas, alzándose posteriormente en la sierra del Escambray, sede de este grupo faccioso, contrario al 26 de julio de Fidel Castro en la Sierra Maestra, pero coincidente en el mismo objetivo contra el golpista Batista.
Con el tiempo el ya ex comandante se convirtió en opositor a Fidel Castro, e incluso fue acusado de un intento contra su vida. Se dijo que la CIA le había proporcionado un bolígrafo con un veneno mortal, que sería administrado mediante una imperceptible aguja. Esta acción resultó aplazada al coincidir con asesinato del presidente de los EEUU, John Fitzgerald Kennedy.
Los otros dos miembros restantes del comando, José Fernández Cossío y Miguel Ángel Domínguez, ocuparon diversos cargos en el régimen castrista hasta sus respectivas muertes. Cossío murió el pasado 8 de marzo siendo embajador retirado, en tanto que Miguel Ángel Domínguez ya había fallecido en noviembre de 1991 de causas naturales.
DOS HECHOS CURIOSOS
Por el supuesto atentado contra Fidel Castro, Cubela fue sentenciado a 25 años de prisión de los cuales solo cumplió 13. Fue liberado en 1979 en medio de un proceso de excarcelación de varios prisioneros políticos, pudiendo viajar España donde ejerció durante años su profesión de médico. Pero lo curioso fue que la revalidación de este título fue firmada por el mismísimo Rey Juan Carlos I.
Cubela murió de neumonía en Miami en agosto del año pasado, a la edad de 89 años. Lo otro fue que al triunfo de la revolución, había resultado electo presidente de la Federación de Estudiantil Universitaria, en contra de la candidatura del entonces miembro del 26 de julio, y más tarde mítico prisionero político, Pedro Luis Boitel, fallecido en 1972 en medio de una huelga de hambre mientras se encontraba purgando su condena.
Maldita Hemeroteca.
