MUJERES EN CUBA: También babalaos
Hace un par de años leímos en la interesante y muy amena web "HyperMedia Magazine", que actualmente habían mujeres con el rango de babalaos, o babalawos, como quiera usted llamarlo, dentro de la religión Yoruba que se practica desde hace siglos en la isla de Cuba.
De la pluma de Abel Sierra Madero, este magnífico escritor nos asegura que en una conversación que sostuvo en la Habana Vieja con un babalao Ifá y Tata Nganga en la religión palera, Víctor Betancourt, que además era filólogo, lingüista y conocedor de la religión como pocos, le confesó que habían dos mujeres que habían sido consagradas en Cuba como Iyá Oní Ifá. (Sacerdotisas)
"Mis investigaciones religiosas - en Matanzas sobre todo - me habían aportado indicios de que durante los tiempos de la trata y la esclavitud, habían entrado a Cuba mujeres con cierto rango: las llamadas princesas, que tenían conocimientos especiales de Ifá, y a las que se les compró la libertad inmediatamente. Esas mujeres les dictaron Ifá a muchos babalawos", le aseguró este experto sacerdote.
Agregó además que Iyá Oní Ifá era un concepto moderno que no aparecía en los textos yorubas antiguos, que aunque una Apetebí no era lo mismo que Iyá Oní Ifá las mujeres en Nigeria, esposas de un babalao, eran consideras como Apetebí. "Por ejemplo en Cuba, la Apetebí es la que recibe el Kofá de Orula, pero en Nigeria, aunque no esté iniciada, una esposa de un babalawo ya tiene rango Apetebí", le aseguró este experto.
El concepto Iyá Oní Ifá - según le dijo - había comenzado en los EEUU cuando en 1985 a una judía la habían hecho Ifá, convirtiéndose además en la primera Iyá Oní Ifá en América. Que con la intención de incorporar a la mujer Cubana en estos preceptos, y luego de una exhaustiva investigación hecha en el África, llegaron a la conclusión que las mujeres también podían ser babalaos, contrario a lo que hasta ahora se creía en Cuba, que por demás es como la meca de esta religión en la América Hispana.
De hecho este experto aseguró que cuando él le ha preguntado a distintos babalawos Cubanos la razón por la cual no admiten mujeres en Ifá, no pueden dar una explicación al respecto, ni siquiera pueden explicar por qué ellos mismo se hicieron babalaos y agregó entonces: "Para consultar y hacer dinero, pero no te saben explicar por qué la mujer no puede estar ahí".
A pesar de que Víctor no deja de reconocer años atrás la religión en Cuba era muy diferente, pero que aún así la gente prefirió siempre irse a "consultarse" con una santera en vez de un babalao. Y que a modo de crítica aseguró: "El dinero también ha provocado la multiplicación de santos. Cuando el extranjero viene a hacerse santo, además de las maletas y el equipaje, debe contratar un contenedor para poder llevarse la cantidad de santos que se dan en Cuba; porque es doble ahora, es increíble, parece que se han creado dos divinidades".
Aunque no somos ni siquiera conocedores en el tema, sí sabemos que tanto María Cuesta como Nidia Águila de León, son dos de las más conocidas sacerdotisas de Ifá, sin embargo a pesar de estos avances, el asunto del Iyaonifá en Cuba ha traído no pocos disgustos entre sus practicantes, sobre todo dentro de "la plana mayor".
Tanto así, que la "Asociación Yoruba de Cuba", entidad religiosa considerada oficialista, expresó un contundente rechazo hacia ellas diciendo: "Un grupo de mujeres se escondió flagrantemente para profanar en su máxima expresión nuestra cultura patrimonial, nuestra religión”. ¿Machismo?, ¿celo profesional?, ¿santeros de la vieja escuela?, cualquiera de estos pretextos o excusa podría ser el origen de semejante diatriba. La entrevista, que además de interesante es bastante extensa, la puede ver completa aquí en este link"Mujeres Babalwos".
Como bien asegura Sierra, con la llegada del Castrismo el cubano dejó de ser religioso para convertirse en un "creyente de la política", donde el único dios que existía era el de barba y traje verde oliva. Sin embargo, al caerse el comunismo en 1990 y quedarse ese dios sin respuestas, la gente retomó sus santos con mayor intensidad si se quiere. "Las religiones africanas se convirtieron en el refugio de muchísima gente, que buscaba en ella ayuda y solución a sus problemas", aseguró el autor.
