El origen español de los dos apellidos

En países como Alemania, Francia, Estados Unidos e incluso Argentina entre los de la América hispana, solo utilizan un solo apellido, el del padre. En cambio en España, y la mayoría de sus ex colonias, es tan valido el del padre como el de la madre. De hecho su uso es oficialmente en todos los documentos.

Según recoge la historia, el uso de los dos apellidos en España se consolidó principalmente entre los siglos XV y XVI. Esta consolidación coincidió con un aumento significativo de la población y la necesidad de llevar un registro civil y fiscal más preciso. En 1.501, el cardenal Francisco Giménez de Cisneros estableció la norma de que cada persona recibiría el apellido de su progenitor masculino. 

Posteriormente, más adentrados en el siglo XVI, se popularizó el uso de dos apellidos entre la nobleza y la clase alta de Castilla. No solo para establecer distancia con las clases bajas, sino porque se consideraba un reconocimiento de pertenencia a dos linajes respetables, tanto por parte del padre como de la madre. No fue hasta 1889, con la creación del primer Código Civil español, cuando se estableció el uso oficial del apellido materno y paterno.

Concretamente, el artículo 114 recogía que “los hijos legítimos tienen derecho a llevar los apellidos del padre y de la madre”. Por tanto, a partir de este momento, el doble apellido se extendió a todos los ámbitos, hasta convertirse en una norma obligatoria que, según Alfaro, servía para identificar “de una forma eficaz y fiable a los españoles. Por otro lado la lingüista de moda en las redes, Elena Herraiz, agregó en su podcast que el motivo fue "demostrar la pureza de sangre", sobre todo a partir de que los Reyes Católicos expulsaron a los judíos en 1492, lo que se consolidó después en el siglo XV. 

Parejamente, hay que admitir también que los apellidos españoles que terminan en “-ez”, como Rodríguez, López, González, Jiménez… se introdujeron en la Edad Media y significa “hijo de”, y en otros casos no provenían exclusivamente del nombre del padre o de la madre, sino del oficio familiar o de algún lugar (Zapatero, Medina) o de las características físicas de los antepasados, como Rubio, Moreno, Calvo. 

Según datos publicados por el diario "La Razón", el último informe del Instituto Nacional de Estadística (INE)los nombre más comunes durante 2020 en nuestro país fueron Antonio y María Carmen. Mientras, García se convierte en el apellido más popular en España. Antonio lidera esta clasificación, cuyo nombre es usado por 655.030 hombres. A este le siguen Manuel (573.480) y José (564.478). El top 10 lo completan Francisco, David, Juan, Javier, José Antonio, Daniel y José Luis.

Info: La Razón, ABC.