POSADA CARRILES: Y esa memoria de los Cubanos
Hoy se cumplen 39 años de la fuga de la prisión de San Juan de los Morros, en Venezuela, del cienfueguero Luis Posada Carriles, militante anticastrista y ex agente de la CIA que se hizo célebre por los atentados que llevó a cabo con tal de derrocar a la revolución. Para otros un vulgar terrorista.
¿Terrorista?, sin lugar a dudas, no fueron pocas las bombas y atentados que puso y cometió en países donde el régimen cubano tenía intereses, Colombia, Costa Rica, Jamaica o Portugal, en cambio técnicamente no había ninguna diferencia entre esas bombas y las que puso el movimiento 26 de julio por toda la Habana contra Batista, ideológicamente sí, muchas.
Total, que como si hubiera sido un capricho de la vida, dio la cabrona casualidad que Carriles murió a los 90 años de edad, que fue la misma con la que partió, hacia no se sabe donde, el que tanto combatió a través de su azarosa vida, el dictador Fidel Castro. Posada pasó casi sesenta años en esos trajines, y aunque lo intentó de varias maneras, nunca pudo con él personalmente.
Fue acusado como autor intelectual del horrendo crimen de Barbados, aquella bomba que derribó un avión el seis de octubre de 1976 y donde murieron 73 personas inocentes. Y aunque fue exonerado de ese atentado, el New York Times citó un reporte del FBI, fechado en noviembre de 1976 y obtenido por el Archivo de Seguridad Nacional, donde dice que una fuente fidedigna aseguró que Posada Carriles había estado en las dos reuniones en las que se planeó el vil atentado.
Precisamente, esperando a que los fiscales apelaran el fallo en busca de llevarlo nuevamente a los tribunales civiles, Carriles escapó de la prisión donde estaba disfrazado de sacerdote, y luego de pasarse nueve meses entre rejas. De esa fuga, en 1985, hoy se cumplen 39 años como ya dijimos.
En 1990 estando en Guatemala, - agregó el New York Times - recibió varios disparos, "aparentemente por parte de operativos de inteligencia cubana"; que estuvieron a punto de darle "baja de la foto". "Uno de ellos le impactó en la lengua y lo dejó con un problema severos del habla".
Sin embargo, no sabemos si fue por la gravedad de ese hecho o que, pero siempre negó vehementemente haber estado vinculado con esa bomba, mientras que por otro lado no tuvo problemas para admitir haber sido el cerebro de los diversos atentados en hoteles y centros de la Habana.
Se mantuvo en fuga hasta el año 2000, cuando reapareció en Panamá - con toda probabilidad para matar a Castro - en momentos en que el dictador cubano se encontraba en una cumbre. Fue Castro -precisamente- quien anunció su presencia y denunció el intento. Carriles y varios de sus colegas fueron arrestados en Panamá, y en su caso fue condenado a ocho años de prisión.
Se salvó que la presidenta panameña Mireya Moscoso, casi al terminar su mandato, le concediera el perdón en 2004. En una entrevista, otro de los líderes históricos del exilio Miamense e igualmente belicoso, el señor Santiago Álvarez Magriñá, y uno de aquellos hombres de Panamá, digamos terrorista para algunos y luchador por la libertad de Cuba para otros, aseguró que Posada Carriles era un tipo encantador.
"Hacía reír a todos, tenía una anécdota para todo y te hacía reír. Era muy buena compañía”, dijo quien además fuera ex integrante de la brigada 2506 que atacó Playa Girón, también supuestamente Boca de Samá, con dos muertos y dos niñas heridas, y amigo personal de Posada Carriles. El mismo hombre que en septiembre del 2023, va a ser un año ahora, acogió en el propio jardín de su casa de Miami a un grupo de los llamados "Mypimeros" del régimen de Raúl Castro y su presidente de paja, Miguel Díaz Canel.
¿Dime algo Fernández?.
Lo tuvieron a distancia de una pedrada, pero no, en ese momento en lo que menos pensaban aquellos 73 Mypimeros era en aquellos pobres inocentes que cayeron en el mar de Barbados, lo importaba allí en aquella reunión era buscar la manera urgente de que el billete volviera a entrarle a la familia Castro como años antes, y aunque Álvarez Magriñá se hiciera el tonto.
De hecho, la mayoría de la mercancía que se vende en esas tiendas procede de aquella ciudad, considerada por ellos mismos como el nido del terrorismo anti Castro, que por fortuna ya no estaba. No solo eso, es que el anfitrión - según afirma el New York Times citando fuentes federales - fue quien introdujo a su gran amigo en territorio norteamericano.
Pero te digo más, porque lo hay. En un discurso pronunciado por Fidel Castro el 15 de abril de 2005 en el Palacio de las Convenciones de la Habana, el dictador dijo esto: «Vean la historia del “próspero” hombre de negocios, el “experto en urbanismo” y representante de Posada Carriles allá en Estados Unidos. Nadie se explica cómo puede estar ese hombre suelto por allá».
¿Te pregunto de nuevo, Fernández?. No hace falta.
Habría que precisar muy bien cual fue más deshonesto, inmoral y miserable, de toda aquella gentuza allí reunida. Como se dice aquí en España, la pela es la pela. En fin, que Posada Carriles falleció un 23 de mayo del 2018 en la localidad de Miramar, en la Florida, sin lograr su gran objetivo pero sí muchos daños. Le sobrevivieron su esposa Nieves, y sus hijos, Janet y Jorge.
