En junio de 1962, hicieron recientemente 63 años, el régimen castrista instalado en el poder en Cuba tras la huida del presidente de facto Fulgencio Batista, acordó con la Unión Soviética instalar misiles nucleares en el territorio con la convicción de que era el único medio de disuadir a los Estados Unidos de invadir la isla, pero una cosa son armas defensivas y otra cosa muy distinta lo que se estaba instalando allí.
Sin embargo, en el mes de septiembre de ese mismo año, el Embajador soviético ante la ONU, Anatoly Dobrynin, aseguraba a su homólogo norteamericano, Adlai Stevenson, que la URSS sólo estaba enviando armas de tipo defensivo al régimen cubano, una declaración completamente falsa que tenía como objetivo intentar despistar a los Estados Unidos, pues, en realidad, la URSS ya estaba construyendo bases de misiles nucleares que apuntarían hacia el norte.
Poco le importó a Castro que ambas potencias contaran con el apoyo de la OTAN y el Pacto de Varsovia, por lo que el mundo estuvo al borde de la tercera guerra mundial.
Las fotos tomadas por los vuelos de espionaje de Estados Unidos, los aviones U2, dejaron patente lo que allí ocurría, y de uno de estos vuelos resultó derribado el piloto Rudolph Anderson, que falleció en el acto, lo que motivó a la URSS a sentarse a conversar ya que, según se supo posteriormente, el Kremlin jamás había dado la orden de disparar a aviones de ese tipo.
Al parecer fue una decisión personal de Fidel Castro, apoyado por Ernesto Guevara, lo que puso todo patas arriba según lo que tenían planeado. Gracias a dios la URSS se dio cuenta del punto al que se había llegado su protegido; y la verdadera peligrosidad de lo que estaban amamantando.
La crisis se inició con el descubrimiento de rampas de misiles soviéticos. Las cientos de fotos probaban lo que ya se sospechaba, y se extendió hasta que el 28 de octubre se emitió el anuncio de su desmantelamiento y traslado, no solo fuera de Cuba, de todo el continente americano. Sin embargo, la tensión se mantuvo hasta el 20 de noviembre, cuando los Estados Unidos pusieron fin a los patrullajes navales alrededor de Cuba.
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| Aviones norteamericanos vigilaron de cerca el desmantelamiento. |
La crisis se inició con el descubrimiento de rampas de misiles soviéticos. Las cientos de fotos probaban lo que ya se sospechaba, y se extendió hasta que el 28 de octubre se emitió el anuncio de su desmantelamiento y traslado, no solo fuera de Cuba, de todo el continente americano. Sin embargo, la tensión se mantuvo hasta el 20 de noviembre, cuando los Estados Unidos pusieron fin a los patrullajes navales alrededor de Cuba.
Castro, que no dudo ni un momento en poner en peligro a los seis millones de Cubanos que vivían en la isla, y más allá también, no se tomó las cosas con talante y comprensión, si no que allí mismo, y a pesar de seguir siendo un país de satélite de los Rusos por muchísimos años más, comenzaron las diferencias con Moscú manifestando públicamente su disgusto ante el desmantelamiento de aquellas peligrosas bases.
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