sábado, 5 de octubre de 2024

JUDÍOS EN CUBA: Guiro calabaza y miel.

Salomón Gonte, judío residente en Cuba llegado de Rumanía.
Foto: Hypermerdia Magazine.

Dicen que los judíos no son fáciles, no lo niego, que son gente muy rara centrada en sus tradiciones y que en los negocios siempre han sido implacables, avaros, codiciosos y usureros, opiniones que serían discutibles por supuesto, pero nadie podrá negar que de ese pueblo han salido grandes científicos, artistas, filósofos, economistas, políticos, escritores y como si fuera poco el influencer más grande de toda la historia, Jesús de Nazareth.

Cuando los nazis llegaron al poder en Alemania en 1933, los judíos vivían en muchos países de Europa. Unos nueve millones se calcula, países que luego terminaron siendo ocupados por la Alemania Nazi durante la Segunda Guerra Mundial. Desde que comenzó el Pogromo de Polonia, hasta el final de la guerra, dos de cada tres judíos estarían muertos y para el resto que quedó, sus vidas cambiaron para siempre.

Aún así, buscaban reparar el daño causado por el Holocausto y no fue hasta el 1947 que las Naciones Unidas aprobaron la partición de la región de la Palestina, lo cual no quiere decir que los Palestinos existieran, hasta que por fin, el 14 de mayo de 1948, David Ben-Gurion declaraba el Estado independiente de Israel. Desde entonces, los Israelitas viven en un eterno conflicto que le ha llevado hasta hoy, domingo 5 de octubre de 2024.

En Cuba lo vivimos.

Recuerdo que mi padre me decía: "Mientras un Español se metía toda su vida bajando y subiendo la persiana de su establecimiento con un gancho, los judíos la bajaban eléctricamente en unos pocos y sabes porque, porque todos van a la universidad".

Por eso dicen que el dictador español Francisco Franco se encargó de crear el bulo, de que la presencia judía en Cuba no era nada aconsejable. De hecho, uno de los espías que capturó Fulgencio Batista en la Habana procedente de España, Heinz Augusto Lansing, que después lo fusilaron en el castillo del Príncipe en 1942, se encontraba - entre otras cosas - en esos trajines. Y el Cubano como siempre, se dejó "comer la oreja" y, de ser un país y un pueblo que acogía a todos los necesitados que llegaban a sus costas, se convirtió de pronto en una isla bochornosamente antisemita.

Judíos a bordo del St Louis.
Ni se imaginaban el destino que les deparaba. //

Claro, eran tantos españoles y extranjeros los que habían en la isla que ya el trabajo comenzaba a escasear, y si encima había que dar cobijo a toda aquella gente preparada y sumamente trabajadora, pues imagínate. Pero sobre todo, que pondría en peligro lo que ellos con tanto sudor habían logrado. Los españoles lo sabían perfectamente, una nación de emigrantes termina siendo próspera. Y funcionó, porque así hemos sido y seguimos siendo, no los creemos todo.

El 13 de Mayo de 1939, cuatro barcos procedentes de Europa y repletos de judíos refugiados que huían del nazismo hitleriano, buscaron amparo en el continente Americano. Uno de ellos, el "SS. St Louis", transportaba la friolera de 937 almas cuando tocó puerto en la Habana. Sin embargo, las autoridades impidieron que bajaran. No fue solo el St Louis, también llegaron "El Orduña", "El Flandre" y "El Orinoco", todos con personas que se encontraban en la misma situación desesperada.

--El 27 de mayo de 1939, a los pocos días en que el St. Louis arribara, llegó el Orduña de la British "Pacific Steamship Navigation Company con 120 judíos austriacos, checos y alemanes a bordo. Solo consiguieron bajar 48.

-- A finales de mayo de ese mismo año el buque francés Flandre transportó a 104 pasajeros, eran judíos alemanes, austriacos y checos, pero al igual que los anteriores los funcionarios cubanos le volvieron a prohibir la entrada.

--El 27 de mayo de 1939 el barco Orinoco salió de Hamburgo con destino al puerto de la Habana con 200 pasajeros judíos a bordo. Esta vez no bajó ni uno solo, los 200 judíos se tuvieron que regresar a Alemania y nunca más se supo de ellos. Ya sabemos donde terminaron.

El presidente Federico Laredo Brú, "velaba" por el bienestar de todos los cubanos, mientras que el sector "Franquista" en la isla, encabezado por el "Diario de la Marina", propiedad de la influyente familia Rivero, así como el "Avance" de la familia Zayas, se encargaron de lo demás.

Incluso fuimos tan malos que oficiales de extranjería del gobierno Cubano se aprovecharon de la situación y, en el consulado de Cuba en Europa, hicieron su agosto vendiendo visas como punto de tránsito de camino a los Estados Unidos. Las vendían a 200 o 300 dólares cada una, que en la actualidad y, según la inflación, serían alrededor de cinco mil dólares. Una estafa en toda regla.

Entonces decidieron que para entrar en la isla debían pagar una fianza de entre 43o y 500 dólares, y ni eso resolvió el incordio. En fin, que como conclusión de esta triste historia, de todos los judíos Gran Bretaña aceptó solamente 288, Holanda 181, Francia 224 y Bélgica 214. Solo el 14% logró escapar antes de que se desatara la guerra en 1940, el resto, incluyendo la mayoría de los que venían en esos barcos, terminaron en los campos de concentración y de exterminio nazis.

Con los años, no muchos, 20 nada más, el pueblo Cubano empezó a vivir la misma película en 1959, incluso desde entonces se le dio "tremenda caña" a los Testigos de Jehová. Mire, mil o tres mil judíos no significaban nada para un país como Cuba, que había admitido más de un millón y medio de españoles. De hecho, muchos de aquellos judíos eran jóvenes e incluso niños, con lo cual terminarían insertándose con total seguridad. Como ya habían hecho los Sefardíes Turcos desde principios del siglo XX.

Solo un dato y sin abrumarle: En el año 2009 en el NASDAQ habían más empresas israelíes que compañías Chinas, Europeas e Indias juntas. En la actualidad hay 30, de las cuales son líderes en sus respectivas industrias. Estas empresas le han ayudado a establecerse con un rol importante en el panorama empresarial mundial, sobre todo el tecnológico, entre ellas Teva, Elbit y SentinelOne.

Incluso acaban de venderle a un grupo Alemán la empresa WalkMe, la de inteligencia artificial, en más de 1,500 millones de dólares. Nada, que aplicando un sabio proverbio cubano, se podría afirmar que con los judíos perdimos "guiro, calabaza y miel". Dicen los místicos hinduistas que todo lo malo que hiciste en la vida termina regresando, le llaman el karma cósmico, y no solo que regresa, si no que lo hace diez veces más potente. Saque usted sus propias conclusiones.

Jorge García
Maldita Hemeroteca

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