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| En primer plano Tomás Estrada Palma, ex general Maximo Gómez y el gobernador norteamericano Leonard Wood. // |
Si usted de llama Baudilio, sepa que su santoral es este martes 20 de mayo, día además de San Bernardino de Siena, Santa Lidia de Tiatira, Santa Áurea de Ostia y San Lucífero.
Sin embargo, para los Cubanos tiene otro gran significado en especial, ya que fue el día que se declaró oficialmente a Cuba como una republica con la elección, además, de Don Tomás Estrada y Palma como el primer presidente electo de la democracia isleña. Fíjese si es importante.
"Igualmente fue el día que se escogió para inaugurar un nuevo tramo del malecón habanero, comprendido entre las calles Belascoain hasta San Lázaro".
Ni siquiera han tendido la delicadeza de homenajear a los más de 20 mil cubanos - y no cubanos - que igual ofrendaron su vida por la libertad de la patria. En fin, que el veinte de mayo fue una fecha sagrada para los Cubanos, hasta que en 1959 llegaron esos y acabaron con todo, hasta con la historia.
Y que por cierto, fue el instrumento con el que los gobiernos se valieron para asegurar y poner en orden una convulsa democracia caudillista, que por su inexperiencia a cada rato ponía en riesgo la prosperidad y modernidad de una nación basada en los principios de libertad y democracia.
De hecho, fue el día escogido para llevar a cabo el levantamiento de color en 1912, que dio como resultado la matanza de más de seis mil compatriotas de la raza negra. Lo puede decir con tristeza, Cuba es uno de los poquísimos países en el mundo que no celebra el día de su independencia, excepto grupos de Cubanos en el exilio que no lo pasan por alto, sobre todo en Estados Unidos, aunque cada vez son menos.
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