Se cumple otro aniversario del monstruoso asesinato cometido por la dictadura Castrista en aguas territoriales próximas a la Habana, el hundimiento del Remolcador 13 de marzo.
Como parte de la Crisis de los balseros de 1994, en la madrugada del 13 de julio de 1994 las autoridades cubanas hundieron al remolcador "13 de marzo" en medio del océano, tras ser secuestrado por un grupo de Cubanos que intentaban huir de la isla rumbo a la Florida, en Estados Unidos.
La embarcación llevaba a bordo 71 personas y 41 de ellas murieron ahogados, incluyendo 12 menores de edad que viajaban junto a sus padres. Uno de aquellos niños, Helen Martínez Enríquez, tenía apenas seis meses de edad cuando cayó al agua.
El régimen Castrista se negó a rescatar los cuerpos que fueron a parar al fondo del mar, y que sepamos, allí siguen.Según testimonios de los treinta y un sobrevivientes, la tripulaciones de los también remolcadores "Polargo-2" y "Polargo-5" de la misma empresa, embistieron intencionalmente al "13 de marzo, y encima les negaron el auxilio a las personas que cayeron al agua. Uno de ellos, Jorge García Más, perdió a catorce de sus familiares en aquella masacre.
Durante más de una semana los medios de comunicación cubanos mantuvieron silencio en torno a los hechos, a pesar de las insistentes denuncias en los medios internacionales. Posteriormente, el 5 de agosto, el dictador Fidel Castro se decidió a hablar, y en su diatriba calificó como “esfuerzo verdaderamente patriótico” la actuación de aquellos asesinos que, hasta la fecha, no han recibido su merecido castigo.
Lastimosamente la vida de esos seres humanos, cubanos por demás en nuestra caso, ha servido al menos como un símbolo de la lucha de nuestro pueblo por escapar de esa terrible dictadura que hoy da sus últimos coletazos. Han pasado años sí, pero el pueblo no olvida y aplicará la debida justicia cuando llegue el día.
Por Jorge García
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