LORUS: Lo bueno no sale caro.
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Solemos creer que los productor de gama alta son los mejores. Por ejemplo, si vamos a comprar un par de zapatillas nos proyectamos mental e inconcientemente en unos "Adidas", "Nike", "New Balance", "Puma" o unos "Reebok", por poner unos ejemplos, sin embargo a veces ignoramos que hay otras igual, e incluso mejores, como las francesas "Le Coq Sportif, que fueron las primeras que introdujeron en el mercado la tecnología "Dynactif System".
En el caso de los relojes sucede algo parecido. Para nadie es un secreto cuales son las marcas que están fabricadas por una artesanía experta y con mucha tradición, y que además emplea materiales de primerísima calidad. Suizas como Longines, Rolex, Hublot, Tag Hauer, Hamilton, Omega, Audemars, Breitling, Patek Philippe o incluso Tissot, son marcas indiscutiblemente muy buenas pero resultan bastante caras para un bolsillo medio.
No por gusto la firma japonesa ha sido uno de los principales y más confiables fabricantes del mundo, desde hace siglo y medio por lo menos.
Otro de Seiko de esta misma gama es Pulsar, que incluso se pueden encontrar a precios aún más baratos. Según leí, en el año 1978 la Seiko se hizo con esta marca suiza, entonces conocida como American Hamilton Watch, y desde entonces se ha convertido en otro de sus productos preferidos de gente de un bolsillo modesto. Por cierto, los de Pulsar fueron los primeros que en 1970 lanzaron al mercado el primer reloj digital de tipo LED.
Total que aquel que pueda y como dice el refrán, "San Pedro se lo bendiga", pero lo que me gustaría decir es que que no necesariamente hay que hacer un gran sacrificio económico para obtener un artículo gustoso y duradero. Tampoco se trata de adquirir cualquier baratija, incluso una falsificación, que lo barato también sale caro la mayoría de las veces, me refiero a que por falta de conocimientos, - como me pasó a mi y que por fortuna me salió bien la jugada -, no debemos pagar más de lo debido.
Sé que la economía está mala y que ya ha llegado el momento de perderle el miedo a los productos “low cost”, pero aún así hay que saber ser pacientes y escoger lo mejor que nos venga a nuestra billetera. No hay motivo para desconfiar constantemente de los precios baratos, siempre y cuando sepamos lo que estamos comprando. Que sepas que existen otras alternativas más baratas e igual de válidas y duraderas, como por ejemplo el mío.
Por otro lado existen otras que tambien requieren de un alto presupuesto, y que aunque no sean las anteriores, su precio pudiera superar varios centenares de euros, e incluso miles. No solo eso, algunos relojes digamos de gama media originales, podrían dejar nuestro bolsillo en muy malas condiciones. Festina, Citizen, Orient y no hablemos ya de un Jaguar, Movado, Orix, Certina e incluso un Seiko.
Y es de esta ultima que les quiero conversar.
La milenaria firma Seiko, que fue la primera que sacó al mercado un reloj de pilas, es quizás la preferida en cuanto a relojes automáticos deportivos y de buceo, no obstante hay que disponer de varios centenares de euros en dependencia de su catálogo y de nuestros requerimientos técnicos. Por ejemplo, los modelos Grand Seiko, Presage, Premier, Prospex Divers o los Astron, suelen superar los mil y hasta los dos mil euros en ocasiones.
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Pero no.
En este caso quiero hablar de relojes que son decentes y que nos pueden costar menos de 100 euros, 80 para ser más exactos. Me refiero al modelo Lorus, uno de los relojes más bonitos e interesantes, y de mejor relación calidad precio que he visto en mi vida. Por lo menos para mi gusto.
Estos relojes son fabricados y distribuidos por la Seiko precisamente, y aunque en este caso se trate de uno de sus modelos más económicos, eso no quiere decir que sean de pobre calidad. Por un lado están fabricados con la misma tecnología y en las mismas fabricas que la marca japonesa, y es aquí donde está el detalle.
Esa es su gran fiabilidad precisamente, y la prueba es que desde que se lanzó en Europa en el año 1982, se convirtió en muy poco tiempo en una de las marcas más populares, lo mismo por sus exquisitos diseños que por su atractiva gama de precios. La marca ofrece una amplia colección que incluye cronógrafos, relojes deportivos, digitales, analógicos, elegantes de señora y de caballero, e incluso infantiles.
Fue por eso que en el año 2008, lo recuerdo muy bien porque en una de las pantallas del centro comercial donde trabajaba estaban transmitiendo los juegos olímpicos de Pekin, lo vi de casualidad en venta en una de las tiendas de este Mall. Pregunté por uno en especial, ya que su esfera y bisel se asemejaba bastante al clásico Rolex GMT Máster, prohibitivo para mi bolsillo, y resultó que por 80 euros no me lo pensé dos veces.
Además de bonito y de ser de mi preferencia, era resistente al agua 100 metros, no para bucear, pero me valía bien porque yo de buzo no tengo nada. En fin, que hace 16 años que lo tengo, le he cambiado la pila en tres o cuatro ocasiones y jamás me ha fallado. Desde entonces ha estado trabajando con una precisión de -más menos- un segundo al mes, con lo cual me resulta genial para mis necesidades.
Por Jorge García.
Maldita Hemeroteca
