Se cumplen dos años del hallazgo del destructor USS Samuel B. Roberts
Adred Lenoir, ya fallecido, sobreviviente de aquella batalla. // |
El destructor USS Samuel B. Roberts (DE-413) de la Armada de los Estados Unidos, fue un buque escolta de la clase John C. Butler. Fue botado en enero de 1944 y asignado en combate en el 28 de abril del mismo año. Sin embargo, apenas el 25 de octubre, en la batalla de Samar en el mar de Filipinas, durante la segunda Guerra Mundial, fue hundido con 90 hombres de una tripulación de 224.
En aquella batalla donde tomaron parte 13 buques y unos 400 aviones de la Armada de Estados Unidos, contra 23 buques y 30 aviones de la Armada Imperial Japonesa, el "Sammy Roberts" le causó severos daños al enemigo. Sin embargo, el 25 de octubre no pudo evitar ser alcanzado por tres proyectiles de 14 pulgadas salidos del acorazado Kongō, los que abrieron un agujero a babor de su sala de máquinas de popa, y terminó por hundirse treinta minutos después.
--El veterano Lenoir, operador de ametralladora, que en la foto estaba a punto de cumplir los 98 años de edad, se mantuvo por espacio de 50 horas en el océano hasta que pudo ser rescatado. No era su día.--
Hasta entonces, era un misterio en que punto del fondo oceánico se encontraba el navío, hasta que en el año 2022, luego de 76 años, fue localizado al fin convirtiéndose en el naufragio más profundo del planeta encontrado hasta ahora. El pecio fue localizado a 6.895 metros de profundidad por el investigador privado Victor Vescovo, que mediante un pequeño submarino de su propiedad pudo dar con los restos.
Vescovo, de "Caladan Oceanic", es un expedicionario y ex oficial de inteligencia de la Armada estadounidense que, además, es piloto de su propio sumergible. Una de sus grandes hazañas la completó en el 2019, cuando bajó hasta el fondo de la fosa de las Marianas, en el océano Pacífico, que con sus 10.935 metros es la mayor profundidad que se conoce en los mares de nuestro planeta.
Hasta entonces, era un misterio en que punto del fondo oceánico se encontraba el navío, hasta que en el año 2022, luego de 76 años, fue localizado al fin convirtiéndose en el naufragio más profundo del planeta encontrado hasta ahora. El pecio fue localizado a 6.895 metros de profundidad por el investigador privado Victor Vescovo, que mediante un pequeño submarino de su propiedad pudo dar con los restos.