sábado, 1 de abril de 2023

Los amantes de Teruel: La versión de Romeo y Julieta al estilo Aragonés

Los amantes de Teruel. Representación teatral. 

Quien no ha escuchado alguna vez la frase: “Esa pareja se parece a los amantes de Teruel, tonta ella y tonto él”. Esta historia, mitad leyenda o mitad verdad, ha sido considerada como la versión de "Romeo y la Julieta"  a la española.

Se tratan de dos momias de la edad media, con mas de 800 años fíjese usted, que se encuentran en un mausoleo en la ciudad aragonesa de Teruel. ¿La época?, siglo XIII, ¿la historia?, pues el amor imposible entre Isabel de Segura, joven de familia rica y Diego Marcilla, un plebeyo sin oficio ni beneficio.

Resulta que el padre de su amada, como condición para merecer el amor de su hija, le retó a convertirse en alguien importante dentro de un plazo determinado de cinco años. A tal efecto el joven Diego marcha a tierras de conquista, digamos a la guerra contra la ocupación musulmana, decidido a conseguir la fortuna y el poder que le hagan merecedor de su amada.

Vencido ese plazo en tan solo un día, el joven se encontró a su regreso que su pretendida Isabel ya se estaba casando con otro amante de nombre Pedro de Azagra. Diego le pidió un beso a Isabel, quizás de despedida, y esta se negó en su condición de esposa que le debía respeto a su marido. El pobre Diego, presa de amor y la desesperación, le dio un infarto y allí mismo quedó. 

A sus funerales acudió toda la ciudad de Teruel, sin embargo nadie comprendía la causa de su muerte. No obstante, en un momento de la ceremonia, fue Isabel quien se acercó al féretro de Diego y, abrazándolo le dio aquel beso que antes le había negado: “Te doy en muerte el beso que no te quise dar en vida” e inexplicablemente también cayó muerta. 

¿Fuerte eh?, incluso de creer. 

A ver, que las momias existen, fueron encontradas en 1533 en esa iglesia de San Pedro y bajo el suelo de la capilla de los Santos Cosme y Damián, entonces se asumió que pertenecían a los legendarios amantes. La capilla donde fueron encontrados se renombró después como "Capilla de los Amantes".

En 1955, debido a la popularidad de las tumbas y al volumen de los turistas, las momias fueron trasladadas a dos sarcófagos nuevos esculpidos en mármol por el escultor Juan de Ávalos. Incluso se le hicieron pruebas de carbono 14, y estas determinaron que se trata de un hombre y una mujer que vivieron entre los años 1300 y 1430, osea las supuestas momias de Diego Marcilla e Isabel de Segura.

Mausoleo en la iglesia de San Pedro de Teruel, en Aragón, España.


Funeral en Teruel 
(Del poeta de Sagua la Grande, en Cuba, Matías Montes Huidobro)

Los Amantes de Teruel
han sido borrados del mapa.

Yacen
en el mármol del olvido.
Nadie cree en ellos ya,
sepultados
bajo las tres XXX
de unas segregaciones
de celuloide,
sierpe incoherente de sonidos.

Los Amantes de Teruel
están muertos
y enterrados. Sus cadáveres están en Teruel
pero ya nadie visita sus sepulcros.

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