Patriotas Cubanos y el campo del honor
Los problemas se resolvían allí, en el campo de honor. |
En el año 1870, el coronel del ejercito libertador Cubano, Manuel Sanguily y Garrite, se batió en un duelo en la Habana. Su rival fue Don José Urioste Velada y la causa que lo motivó fue un cruce mutuo de palabras. (Ofensas)
Los testigos del coronel Sanguily fueron los señores don Fernando Diago y el doctor español Luis Ayesterán Garabaín; en tanto que Don Urioste se hizo representar por el también coronel Alejandro Loret de Mola, ex jefe del ejercito Cubano en Caonao Camagüey, y Don N. Atma.
El arma escogida fue el sable y el derrotado en este duelo fue el Sr. Urioste, que terminó con heridas en el rostro. Destacar que Sanguily era un asiduo esgrimista del casino español y de varios salones más, como el Unión Club, Centro Dependientes, Círculo Militar, la sala de Malecón No 17 o el Club gimnástico de la calle Prado No 86.
Eran años en que la esgrima Cubana comenzaba a ser notoria en todo el mundo. De hecho el padre del campeón olímpico Ramón Fonts, Don Filiberto, era uno de los más destacados profesores.
Caso muy raro: El duelo entre el periodista español Gonzalo de Castañón y el tabaquero cubano Juan María Pérez
El abogado, periodista y coronel de voluntarios asturiano Gonzalo de Castañón y Escaro, director de la "Voz de Cuba" murió mientras preparaba un duelo que debió ser efectuado en la ciudad de Cayo Hueso, Florida, en 1870. Su contrincante sería el también periodista cubano, y lector de tabaquería radicado en esa ciudad, Juan María "Nito" Reyes.
Sin embargo fue otro isleño, un tal Mateo Orozco, quien le dio muerte de manera inesperada de un disparo. Al parecer se presentó en el hotel "Russell House" donde se hospedaba el español y se cogió la bronca para él solo. Castañón respondió al reto y, en un cruce de disparos, se llevó la peor parte.
Antes, ya se había presentado en el hotel a retarlo también un oficial mambí de nombre José Botello. El cadáver de Castañón fue llevado a La Habana e inhumado con honores militares en el antiguo Cementerio de Espada. Los voluntarios de La Habana recibieron un cuerpo embutido en un ataúd de hielo. En la puerta de la necrópolis, el poeta Francisco de Compadrón recitó una composición en homenaje al difunto.
La historia que vino después con los 8 estudiantes de medicina fusilados ya lo conocemos. Sin embargo sí nos gustaría señalar que en 1887, el hijo de Gonzalo Castañón se llevó los restos mortales del asturiano para su aldea natal. Y dicen que pudo comprobar entonces que la acusación a los estudiantes de medicina un año después de su muerte, había sido una falacia.
Juan Gualberto Gómez vs Ignacio Solá
Otro patriota, este de Sabanillas, el destacado periodista y abolicionista Juan Gualberto Gómez, defendió su honor ante el periodista don Ignacio Solá que lo había ultrajado en un artículo en el periódico "La Libertad", por lo que fue retado al campo de honor. El lance fue a sable y tuvo la villa de Guanabacoa como escenario.
Los testigos de Juan Gualberto Gómez fueron don Cayetano Pérez y don Francisco Moriano, mientras que Solá fue representado por Guillermo Patterson y don M. Agustini. Luego de un par de reprises que tuvieron 12 minutos de duración, don Ignacio Solá resultó herido en una mano.
El que quizás haya sido el duelo de la historia en Cuba, y que por suerte no se celebró, fue el protagonizado por el mayor general Ignacio Agramonte y el llamado "Padre de la Patria" Carlos Manuel de Céspedes.
Las desavenencias de Ignacio Agramonte con Céspedes fueron notorias. Sobre todo debido a la tendencia dictatorial y despótica del Bayamés, que llegó al extremo de nombrar a su cuñado Manuel de Quesada y Loynaz como jefe del ejército.
El mayor lo entendió, pero en cambio abandonó su escaño en la Cámara de Representantes y asumió el mando militar de la provincia de Camagüey. Su muerte en Jimaguayú, el 11 de mayo de 1873 contando apenas 32 años, fue una de las grandes pérdidas cubanas en aquella guerra.
Jose Martí vs Enrique Collazo
Decía Collazo:
“Si de nuevo llegase la hora del sacrificio, tal vez no podríamos estrechar la mano de Ud en la manigua de Cuba.
“Si de nuevo llegase la hora del sacrificio, tal vez no podríamos estrechar la mano de Ud en la manigua de Cuba.
José Martí:
Si mi vida me defiende, nada puedo alegar que me ampare más que ella… Pero no habrá que esperar a la manigua, Sr. Collazo, para darnos las manos, sino que tendré vivo placer en recibir de Ud una visita inmediata, en el plazo y país que le parezcan convenientes. Creo, Sr. Collazo, que he dado a mi tierra, desde que conocí la dulzura de su amor, cuanto hombre puede dar. Creo que he puesto a sus pies muchas veces fortuna y amor. Creo que no me falta el valor necesario para morir en su defensa."En 1900, en su libro "Cuba independiente", Enrique Collazo dedicó un amplio espacio a sus recuerdos sobre aquellos tiempos en que trabajó juntos a Martí por la patria. En ese capítulo le llamó “hombre notable y de condiciones excepcionales y poco comunes" y como presagiando el futuro dijo: "Su apoteosis la harán los cubanos más tarde, conservando su efigie y su memoria entre sus grandes hombres.”
Murias, que solo entre 1884 y 1889 participa en nueve entre sables y pistolas, fue periodista, aunque no siempre sus enfrentamientos fueron por opiniones; por su aval de duelista y hombre de letras llegó a ser apodado el Rochefort cubano. Dicen que era una adicto nato. De hecho lo deja plasmado en su libro "Mis Duelos", donde asegura lo siguiente: “Vencer sin peligro no es vencer”.
Jose Maceo vs Guillermón Moncada
El licenciado Francisco Varona Murias está recogido como el cubano que más duelo efectuó y, aunque no se sabe con exactitud cuantos fueron, pero dicen que superó al periodista y político Antonio Iraizoz Villar, que fue segundo con 16. "El tercero en el podio" fue el escritor Manuel Secades, autor de "Patriotas y Traidores" que efectuó 8 duelos, saliendo vencedor en siete.Otro duelo que tampoco se llevó a efecto fue el de José Maceo y Grajales, hermano del lugarteniente general Antonio y Guillermo Moncada Veranes. Maceo, hombre de un carácter muy volátil y escaso de paciencia, retó a duelo a Moncada en un arranque de ira. Se dice que era tal su genio, que en ocasiones masacraba los prisioneros españoles sin respetar el mas mínimo código de honor, actitud reprochada por no pocos mambises.
Antonio Maceo vs Flor Crombet
El propio general Antonio Maceo retó a duelo al mayor general Flor Crombet mientras se encontraban en Jamaica, duelo que fue aplazado por los deberes con la patria. No hizo falta celebrarlo, pues Crombet cayó a las pocas horas del desembarco en las costas de Duaba en abril de 1895, en Palmarito de Cauto, de ahí las hipótesis de que Antonio Maceo pudo haberlo liquidado. Solo agregar que el duelo, a petición de Maceo, había sido solicitado a pistola y a muerte.
Murias, campeón Cubano en duelos
Su ultimo duelo fue en 1889 cuando publicó una injuria contra Paulino Dihins que lo lleva a un enfrentamiento a pistola, de dos tiros a veinticinco pasos. Afortunadamente o muere nadie y se despiden sin consecuencias.
Resulta que Murias - parece - quiso vengar la muerte de Jorrín al que le había dado un ataque de amnesia en pleno duelo. Según las crónicas, Jorrín padecía de esta enfermedad neuronal y, casualmente, ese día se quedó inmóvil con el sable extendido sin hacer ningún movimiento, ni siquiera defensivo, aún así este capitán lo atravesó con el suyo hasta el cazuelet o protector de mano.
Ya en el siglo XX se produce un duelo entre dos senadores de la provincia de Camagüey, Carlos Manuel Rogerio Zayas Bazán, primo segundo de la viuda de José Martí y el doctor en Pedagogía Modesto Maidique Venegas. ¿Duelo?, no, mejor digamos que fue una pelea entre dos guapetones.
Retomando la historia, el herido Rogerio Zayas Bazán fue llevado al hospital de emergencias pero no consiguió sobrevivir, le habían impactado 4 disparos.
En una ocasión en Madrid y en compañía del dramaturgo y humorista Gustavo Robreño, Varona Murias reto al capitán del ejercito español Leopoldo D. Osouville. A este capitán, que ya había atravesado con su sable al cubano Alberto Jorrín en un duelo efectuado en el castillo en la "playa del chivo", cerca del "castillo de la punta", y todavía están esperando a que llegue.
Los duelos estaban prohibidos en Cuba. La prensa daba cuenta de ellos como si hubieran sido un accidente "limpiando el arma" |
Resulta que Murias - parece - quiso vengar la muerte de Jorrín al que le había dado un ataque de amnesia en pleno duelo. Según las crónicas, Jorrín padecía de esta enfermedad neuronal y, casualmente, ese día se quedó inmóvil con el sable extendido sin hacer ningún movimiento, ni siquiera defensivo, aún así este capitán lo atravesó con el suyo hasta el cazuelet o protector de mano.
Murias había sido deportado a España por darle muerte - precisamente en un duelo a pistola - al periodista Español Pascasio Álvarez, director del semanario "El Asimilista". Las dos armas usadas aquel fatídico día eran propiedad del general de la guerra de independencia Carlos Guas Pegueras. Sin embargo la gente quería mucho a Pascasio que, al parecer, tenía muy buen carácter y era muy buena persona. Debió ser por eso que a su regreso a Cuba Murias dijo estas palabras:
«Yo hubiera deseado, en los instantes en que tan pertinazmente se me provocaba, romperle una costilla a mi difamador; pero matarle, ¡jamás! Entre morir y matar, más vale morir y así no le asaltan a uno las dudas acerca de la justicia que le asistió para cometer un acto a todas luces injusto y brutal».
De hecho Murias hizo fabricar un mausoleo para su tumba, pues al parecer Pascasio no tenía familiares en Cuba que se hicieran cargo. Varona Murias murió combatiendo en el poblado de "la Salud", en la Habana, durante la guerra del 1895.
Duelo entre guapetones
Bazán tenía fama de tipo duro, había sido comandante del Ejército Libertador, ayudante de su tío el general López Recio y Loynaz, luego en la republica gobernador de Camagüey entre 1923-1925, secretario de gobernación de 1925 al 1928 con el presidente y general Gerardo Machado y senador por Camagüey desde 1930 a 1931. Pero su fama de tipo duro le venía por haber acabado con los proxenetas de la Habana mientras fue ministro.
Por su parte el Dr Maidique, que había sido su amigo, incluso compartieron manigua con el ejército libertador, se le atravesó cuando los intereses políticos en el partido liberal coincidieron. Hay mismo la amistad de fue al carajo. Maidique le retó a "fajarse a lo hombre" pero Bazán le respondió que donde quiera que lo viera le caería a tiros.
Y así fue.
El 14 de julio de 1931 en plena 5ta avenida de Miramar se formó la balacera. Resultado el bravucón de Carlos Manuel salió gravemente herido y el doctor Maidique huyendo en su coche, pues todo aquella situación además de que violaba las leyes, se empeoraría aun más en su condición de senador de la república. De hecho 30 años antes ya se le había retirado la inmunidad al general Silverio Sánchez Figueras, precisamente por haberle dado muerte en un duelo al también legislador Severo Moleón.
Otros ex mambises, como el entonces representante Mariano Corona, ex comandante del Ejército Libertador y director de "El Cubano Libre", fue acusado de la muerte del periodista Constantino Insua, así mismo los representantes Arias y Vidal Morales se vieron involucrados en la muerte a un jefe de la policía. Vidal fue absuelto pero Arias se volvió loco mientras estuvo preso en el Castillo del Príncipe.
Zayas Bazan |
El doctor Maidique alegó defensa personal, dijo que se habían citado para arreglarlo como hombres y que Bazán le disparó primero. Sin embargo los 4 disparos en el cuerpo del occiso le delataban.
Lo más increíblemente de todo fue que, con conocimiento del senado, el detenido pudo escaparse rumbo a Honduras. Diez años después regresó a la Habana con la intención de retomar su vida política.
Sin embargo el 13 de enero de 1941, mientras se dirigía al despacho de Márquez Sterling, acompañado de su secretario Andrés Alpízar, fueron cosidos a balazos entrando en el edificio "La Metropolitana" sito entre las calles O’Reilly y Compostela. Agonizante aún, Alpízar consiguió identificar a su agresor, un tal Casiano Muñoz y a la señora Carmen Tous, la rival política, como su cómplice.
El increíble record de Eduardo Chibás
El político ortodoxo Eduardo Chibás fue el que más duelos sostuvo con nueve, y en todos salió derrotado. Los efectuaba en la sala de armas del Capitolio y entre sus rivales estuvieron el periodista Camagüeyano Tony Varona Loreda, primer ministro en el mandato de Carlos Prío Socarrás e incluso el propio presidente Prío también, así como el ministro de comercio, el pinareño Alberto Inocente Álvarez Cabrera, y el senador habanero y empresario azucarero, José Manuel Casanova Diviño.
Precisamente en el duelo con Casanova, a sable, Chibás que era un miope severo recibió cierta instrucción de parte del decano de la esgrima cubana José María Rivas, responsable de la sala de armas y destacado juez de campo solicitado por muchos duelistas, quien le aconsejó seguir con la vista la punta del sable de su oponente, a lo que Chibas contestó:
Precisamente en el duelo con Casanova, a sable, Chibás que era un miope severo recibió cierta instrucción de parte del decano de la esgrima cubana José María Rivas, responsable de la sala de armas y destacado juez de campo solicitado por muchos duelistas, quien le aconsejó seguir con la vista la punta del sable de su oponente, a lo que Chibas contestó:
"¿... Cual punta profesor, si yo no veo ni la mía?".
Resumen
Desde 1843 hasta el 1893 se efectuaron en Cuba un total de 202 duelos oficiales, con un saldo de 9 muertos a pistola y 2 a revolver. Los duelos a sable generaron un total de 112 heridos y 2 muertos, en tanto que con espada 26 heridos sin lamentar ninguna pérdida. De estos 202 duelos, 103 fueron a sable, 30 a espada, 66 a pistolas y 3 a revólver.
Fuente: Los duelos de Cuba // Agustín Cervantes // La habana 1936.
Godfried, Eugène (mayo de 2005). "Guillermón Moncada y la derrota del 'Rancheador. // www.enciclopedia.com